Relaciones de pareja

Cómo superar la dependencia emocional y amar con libertad

Cómo superar la dependencia emocional y amar con libertad
logo-unobravo
Angelica Raucci
Redacción
Psicoterapeuta con orientación Cognitivo-Constructivista
Unobravo
PUBLICADO EL
1.6.2023

En el mundo de las relaciones humanas, a menudo nos encontramos con la dependencia emocional o afectiva, una situación en la que una persona se apega de forma excesiva a otra, buscando llenar sus necesidades o carencias emocionales. 

La dependencia afectiva puede afectar diferentes aspectos de la vida y dificultar el crecimiento personal y el desarrollo de relaciones sanas y equilibradas. 

En este artículo, exploraremos en profundidad qué es la dependencia emocional, sus tipos, causas, síntomas y consecuencias. También te daremos estrategias y pautas prácticas para superarla y establecer relaciones más saludables y satisfactorias.

Qué es la dependencia emocional

La dependencia emocional se refiere a una condición en la que una persona se vuelve emocionalmente dependiente de otra, buscando constantemente su aprobación, atención y validación. A menudo, esto se origina a partir de patrones de apego emocional inseguro desarrollados desde la infancia

Para saber en qué consiste la dependencia emocional es importante entender cómo comprende alguien las relaciones interpersonales. Normalmente, la persona se siente incompleta o insegura sin la presencia o atención del otro. Esto puede manifestarse en una necesidad excesiva de estar cerca de la persona de la que se depende emocionalmente, de recibir constantemente su aprobación y de sentirse perdida o desorientada cuando no está presente. En una relación de dependencia, la identidad de la persona puede verse comprometida, hasta el punto de afectar a su toma de decisiones y su sentido de valía personal.

Las dependencias emocionales pueden generar desequilibrios en las relaciones y, cuando esto ocurre, la otra persona se convierte en la fuente principal de satisfacción emocional del dependiente, lo cual puede ser agotador y perjudicial para ambas partes.

La dependencia afectiva puede variar en su intensidad y manifestarse de diferentes formas en cada individuo. Algunas personas pueden depender emocionalmente de una pareja romántica, mientras que otras pueden desarrollar dependencia emocional en la amistad o en familiares cercanos. 

También es importante tener en cuenta que la dependencia emocional como tal no se considera un trastorno o enfermedad mental, sino más bien un patrón de comportamiento que puede afectar negativamente la calidad de vida y las relaciones. Para poder hablar de un trastorno de dependencia emocional deben cumplirse varios criterios diagnósticos del DSM 5 (Manual Diagnóstico y Estadístico de Trastornos Mentales) y la persona ha de ser diagnosticada y tratada por un profesional

Cómo saber si tengo dependencia emocional

Si te preguntas cómo saber si tienes dependencia emocional, existen señales y reflexiones que pueden ayudarte a determinar si estás experimentando este patrón en tus relaciones. A continuación, te presentamos algunos indicadores a considerar:

  • Necesidad excesiva de atención y validación: reflexiona sobre si buscas constantemente la atención y aprobación de los demás para sentirte valioso/a. ¿Sientes que tu autoestima depende en gran medida de la atención que recibes?
  • Miedo al abandono: examina si experimentas un temor intenso a ser abandonado/a. ¿Haces todo lo posible para evitar el abandono, incluso descuidando tus propias necesidades o permaneciendo en relaciones poco saludables?
  • Celos y posesividad: reflexiona sobre si sientes celos y posesividad hacia tu pareja. ¿Te resulta difícil confiar plenamente en tu pareja y permitirles tener su propio espacio y relaciones personales?
  • Falta de autonomía emocional: evalúa si dependes en gran medida de los demás para regular tus estados emocionales. ¿Sientes que tu bienestar emocional depende de la presencia y la respuesta de los demás?
  • Idealización de la pareja: considera si tienes una tendencia a idealizar a tu pareja, viéndola como perfecta y colocándola en un pedestal. ¿Ignoras o minimizas las imperfecciones de tu pareja?
  • Sacrificio excesivo por el bienestar de la relación: reflexiona sobre si sacrificas en exceso tu propia felicidad y bienestar en favor de la relación. ¿Descuidas tus propias necesidades y deseos para complacer a tu pareja?

Si necesitas tener una evaluación más precisa, puedes recurrir a algún cuestionario de dependencia emocional, como el Inventario de Dependencia Emocional (IDE) o la Escala de Dependencia Emocional en la Pareja (SED). También puedes considerar realizar un test de dependencia emocional en internet que te brindará preguntas específicas para analizar tus patrones y comportamientos en las relaciones. 

No obstante, recuerda que el autodiagnóstico a través de este tipo de herramientas no reemplaza en ningún caso la opinión ni el diagnóstico de un profesional de la salud mental. Si crees que podrías tener un trastorno de la dependencia emocional y te gustaría obtener ayuda y orientación, lo más recomendable es buscar el apoyo de un terapeuta capacitado. 

Tipos de dependencia emocional

Dentro del amplio abanico de las dinámicas de dependencia emocional, se reconocen distintos perfiles y se clasifican tres principales tipos de personas dependientes emocionales. Estos perfiles reflejan diferentes roles y dinámicas en las relaciones afectivas, así como distintos tipos de trastornos de apego. Veamos en detalle cada uno de ellos:

Apego afectivo dependiente

Uno de los patrones de dependencia emocional existentes es el de apego afectivo dependiente, en el que la persona asume el rol de demandante y necesitado. Siente una profunda necesidad de atención, afecto y valoración por parte de los demás. Busca constantemente la validación y la cercanía emocional de su pareja o personas significativas en su vida. Su bienestar emocional está fuertemente vinculado a la atención y aprobación externa.

Apego dependiente instrumental

En contraste con el perfil anterior, el dependiente instrumental adopta el rol de necesitado. Busca protección, orientación y cuidados de los demás. Se siente inseguro y requiere que alguien más tome decisiones por él/ella. En este tipo de dinámicas de dependencia emocional, la persona con apego dependiente instrumental tiende a buscar en los demás una especie de guía y apoyo constante para enfrentar las demandas de la vida cotidiana. 

Apego codependiente

El codependiente juega el rol de dador, salvador y ayudador. Tiene una tendencia a crear relaciones en las que asume la responsabilidad de cuidar y satisfacer las necesidades del otro. Busca asegurar su propia existencia y sentirse indispensable para el otro. La codependencia puede agravar y perpetuar la dependencia emocional hacia una persona, creando un ciclo disfuncional de necesidades mutuas.

Estilos de apego emocional: la semilla de la dependencia afectiva

Para saber qué es tener dependencia emocional hay que tener primero claro qué son los apegos afectivos o emocionales y cuál es su relación con esta problemática. 

El apego emocional es un vínculo afectivo profundo y duradero que se desarrolla entre dos personas, generalmente entre un individuo y su figura de apego primaria, como los padres o cuidadores principales. Básicamente, se refiere a la conexión emocional y la sensación de seguridad, protección y cercanía que se experimenta en relaciones íntimas. La diferencia entre apego emocional y dependencia emocional es que el primero se basa en vínculos saludables y la segunda es una consecuencia patológica de establecer vínculos perjudiciales.

Por lo tanto, los apegos afectivos desarrollados en la infancia pueden tener una influencia significativa en la predisposición a la dependencia emocional en la edad adulta. Por ejemplo, las personas con un tipo de apego ansioso-ambivalente, caracterizado por la preocupación excesiva por el abandono y una búsqueda constante de validación emocional, pueden ser más propensas a experimentar dependencia emocional en sus relaciones adultas. 

En algunos casos, las personas pueden desarrollar una contradependencia. Esto se manifiesta cuando alguien rechaza cualquier forma de dependencia afectiva y busca de forma excesiva su independencia, como puede ocurrir, por ejemplo, con la persona narcisista en pareja.

Si bien el narcisismo y la dependencia emocional pueden ser dos extremos opuestos en el espectro de las relaciones interpersonales, también pueden estar relacionados en ciertos casos, ya que tanto los narcisistas como las personas dependientes emocionalmente pueden tener una falta de autoestima saludable y buscar constantemente la aprobación y el reconocimiento externo. 

¿Amor o dependencia emocional? 

La dependencia emocional no es amor, son dos conceptos diferentes, pero en ocasiones pueden confundirse en una relación de pareja. ¿Cómo saber si es amor o dependencia? Lo primero es tener claro en qué consiste cada uno de estos dos conceptos.

El amor en una relación se caracteriza por una conexión emocional profunda, respeto, confianza y apoyo mutuo. Existe una independencia emocional saludable, donde cada individuo se siente completo y seguro en sí mismo, y el vínculo se basa en la elección libre y consciente de estar juntos. En contraste, la dependencia emocional en la pareja implica una relación desequilibrada donde uno de los miembros se vuelve emocionalmente dependiente del otro. 

En los casos en los que a la dependencia afectiva, caracterizada por esa necesidad excesiva de atención y afecto, se le suma una búsqueda compulsiva y obsesiva de relaciones románticas, incluso si estas son dañinas o poco satisfactorias, podemos hablar de adicción al amor, una forma poco saludable de relacionarse románticamente con otras personas.

Los síntomas de dependencia emocional en la pareja pueden consistir en una necesidad apremiante de estar con la otra persona, un marcado miedo al abandono o a no saber dónde se encuentra en un determinado momento, una sensación de malestar y celos cada vez que el otro miembro de la pareja sale con sus amistades o decide iniciar otro tipo de contactos con terceras personas y una necesidad de validación constante.

Un buen apego emocional en la pareja es esencial para no caer en la dependencia afectiva, en la que la necesidad de confirmación y el reconocimiento son las fuentes principales de satisfacción emocional. Estos patrones pueden generar un desequilibrio en la relación, con un miembro asumiendo el papel dominante en la satisfacción emocional del otro. Además, pueden surgir otros problemas de pareja, como la dependencia financiera o la dependencia en la toma de decisiones importantes.

Es importante reconocer que la dependencia emocional hacia la pareja no es una expresión saludable del amor. En lugar de construir una relación basada en la autonomía, el respeto mutuo y el crecimiento personal, este tipo de enganche emocional puede llevar a la pérdida de identidad individual, a la falta de límites y a una sensación constante de necesidad y angustia. 

Es esencial ser conscientes de estos patrones y buscar el desarrollo de una relación más equilibrada, donde ambos miembros puedan crecer y desarrollarse como individuos independientes dentro del contexto de una relación de apoyo y colaboración. Recuerda que, en algunos casos, para lograr esto puede ser necesario el apoyo de un psicólogo especialista en dependencia emocional.

Diferencia entre amor y dependencia emocional
Foto de Asad Photo Maldives (Pexels)

Cómo evitar la dependencia emocional

La dependencia emocional puede afectar a diferentes aspectos de nuestras vidas, incluyendo nuestras relaciones de pareja, amistades, en nuestra familia e incluso las interacciones con nuestras mascotas. 

A continuación, te presentamos algunas claves para evitar la dependencia emocional en cada uno de estos contextos.

Dependencia emocional en pareja

Existen distintos tipos de dependencia emocional en la pareja que pueden tener un impacto negativo en estas relaciones de a dos; por ejemplo, la dependencia psicológica en la que uno de los miembros depende del otro para su bienestar mental y experimenta malestar cuando está sola o su pareja se aleja; o la dependencia económica, en la que la persona no tiene capacidad o confianza para mantenerse económicamente por sí misma.

Cuando se trata de evitar una dependencia emocional de pareja es fundamental establecer límites saludables y fomentar la independencia emocional de cada individuo. Esto implica que cada miembro de la pareja tenga la capacidad de mantener su propia identidad, autonomía y bienestar emocional, sin depender del otro para satisfacer sus necesidades emocionales.

A continuación, te dejamos algunas pautas que puedes poner en práctica para superar la dependencia emocional en pareja:

  • Establece límites saludables: comunica tus necesidades y expectativas de manera clara y respetuosa. Aprende a decir "no" cuando sea necesario y prioriza tu bienestar emocional y autonomía.
  • Fomenta la independencia: cultiva tus propias aficiones, intereses y metas personales. Mantén una identidad propia y evita perderte en la relación. Promueve un equilibrio entre el tiempo que pasas juntos y el tiempo que dedicas a ti mismo/a.
  • Autocuidado y amor propio: dedica tiempo para cuidar de ti mismo/a. Valora tus cualidades, trabaja en tu autoestima y satisface tus propias necesidades emocionales. No te bases exclusivamente en tu pareja para sentirte completo/a.
  • Autoestima y relaciones de pareja: una buena autoestima es crucial para evitar un apego emocional excesivo en las relaciones de pareja. Trabaja en fortalecer tu autoestima y desarrollar un sentido de valía personal independiente de la aprobación de tu pareja. Reconoce tus propios logros y habilidades, y no te menosprecies ni te subestimes en la relación.

Por último, cabe señalar que la dependencia emocional y violencia de género también pueden ir de la mano, tal y como se ha demostrado en varios estudios científicos (Aiquipa, 2015; Hilario et al., 2020). Una persona emocionalmente dependiente puede quedar atrapada en una relación dañina donde existe un desequilibrio de poder y control, lo que genera un ciclo perjudicial en el cual la víctima se siente indefensa y con una baja autoestima. Cuando la violencia en pareja ocurre, es esencial buscar apoyo externo y ambientes seguros basados en el respeto, la igualdad y la autonomía personal.

Dependencia emocional en amigos

Las amistades desempeñan un papel importante en nuestra vida, y es esencial mantener relaciones equilibradas y saludables. Podemos poner en práctica estrategias para evitar la dependencia emocional con amigos, desde cultivar relaciones basadas en la reciprocidad hasta diversificar nuestro círculo social para evitar depender emocionalmente de una sola persona.

  • Cultiva relaciones equilibradas: busca amistades basadas en la reciprocidad y el respeto mutuo. Evita relaciones donde sientas que siempre das más de lo que recibes y mantén un balance saludable en tus interacciones.
  • Diversifica tu círculo social: amplía tu red de amistades para no depender emocionalmente de una sola persona. Conéctate con diferentes grupos y participa en actividades que te interesen. Esto te permitirá tener una variedad de relaciones y evitar la dependencia emocional en la amistad.
  • Fomenta la autonomía emocional: trabaja en desarrollar tu propia independencia emocional. Aprende a satisfacer tus propias necesidades afectivas y a encontrar equilibrio dentro de ti mismo. Esto no significa alejarse de las amistades, sino más bien tener una base sólida de autoestima y bienestar emocional que te permita mantener relaciones saludables y equilibradas.

Dependencia emocional en jóvenes

Los niños y adolescentes están en una etapa crucial de su desarrollo emocional y social, por eso es fundamental fomentar un apego afectivo saludable en sus relaciones. Para evitar la dependencia emocional infantil y el enganche emocional en adolescentes es importante fomentar su autonomía, promover su toma de decisiones independiente y brindarles herramientas para establecer relaciones saludables y equilibradas.

  • Promover la autonomía: fomenta la toma de decisiones independiente y la responsabilidad personal. Anima a los jóvenes a desarrollar sus propios intereses, habilidades y metas. Es importante enseñarles a mantener una identidad propia y a no depender emocionalmente de alguien para ser felices.
  • Educación emocional: es esencial brindar a las jóvenes herramientas para gestionar sus emociones de manera saludable. La dependencia emocional en la adolescencia puede hacer difíciles las relaciones interpersonales; por este motivo, es fundamental enseñar a los adolescentes habilidades de comunicación asertiva y resolución de conflictos para que puedan expresar sus necesidades y establecer límites saludables.
  • Fomenta la empatía y el respeto: enseña a los jóvenes la importancia de la empatía y el respeto hacia los demás. Promueve la comprensión de las necesidades y emociones de los demás, así como el valor de establecer límites y respetar los límites de los demás. Esto les ayudará a desarrollar relaciones saludables basadas en el respeto mutuo y la reciprocidad, evitando depender emocionalmente de alguien.

Dependencia emocional a mi mascota

Las mascotas nos brindan compañía y amor incondicional, pero es importante mantener una relación equilibrada con ellas. 

A continuación, exploraremos cómo no tener dependencia emocional hacia nuestras mascotas, y mantener un equilibrio saludable entre su compañía y nuestras necesidades emocionales individuales.

  • Mantén una relación equilibrada: aunque es natural tener un apego afectivo con nuestras mascotas, es importante mantener un equilibrio en la relación. Evita depender exclusivamente de ellas para satisfacer tus necesidades emocionales. Cultiva otras relaciones humanas significativas y busca un equilibrio en tu vida.
  • Autocuidado: asegúrate de atender tus propias necesidades emocionales y físicas, además de las de tus mascotas. Dedica tiempo a actividades que te hagan feliz y que no involucren únicamente a tus mascotas. Esto contribuirá a mantener una relación saludable y evitar una dependencia emocional a estos animales.

Dependencia emocional familiar

La dinámica familiar puede ser un terreno propicio para la aparición de la dependencia emocional de padres a hijos y la dependencia emocional en hermanos. Por ejemplo, a través de la búsqueda constante de validación o la satisfacción de necesidades entre miembros de la familia.

A continuación, te damos algunas claves para evitar la dependencia emocional familiar: 

  • Establece límites y promueve la autonomía personal: establece límites claros que permitan a cada individuo desarrollarse de manera independiente. Evita la sobreprotección y permite que el hijo/a adulto/a tome decisiones y asuma responsabilidades propias.
  • Cultiva relaciones equilibradas y de apoyo: si eres madre, busca una relación de apego emocional madre-hijo o un vínculo madre-hija basado en el apoyo y la comprensión mutua. Fomenta la comunicación abierta, la empatía y el respeto para evitar la dependencia emocional familiar.
  • Promueve la individualidad y la independencia emocional: fomenta la búsqueda de intereses y actividades individuales tanto en la madre como en el hijo/a adulto/a. Cultiva relaciones sociales fuera del ámbito familiar y encuentra un equilibrio entre la vida familiar y las metas individuales.

Recuerda que cada persona y cada familia son únicas y las dinámicas pueden variar. El objetivo es construir relaciones basadas en el respeto, la autonomía y el apoyo mutuo. Si sientes que la dependencia emocional es un desafío para ti, considera buscar apoyo profesional para explorar estrategias personalizadas y construir relaciones más saludables.

Causas de la dependencia emocional

Para entender qué provoca la dependencia emocional tenemos que fijarnos en sus causas. Estas pueden ser diversas y más o menos complejas, pero comprenderlas nos ayuda a desentrañar los motivos detrás de este patrón de comportamiento. A continuación, profundizamos algunas de las causas de la dependencia emocional.

Experiencias tempranas de apego inseguro

Los distintos tipos de apego emocional que hemos experimentado en la infancia y la calidad de las relaciones con las figuras de cuidado pueden desempeñar un papel importante en la forma en que desarrollamos nuestra capacidad para establecer relaciones saludables en la etapa adulta. Si en la infancia experimentamos apego inseguro, como falta de atención, negligencia o abandono, es más probable que busquemos desesperadamente la validación y caigamos en una relación de dependencia.

Baja autoestima

La dependencia emocional y la baja autoestima pueden estar relacionadas. Los problemas de autoestima pueden hacer que una persona dependa de la aprobación y la validación externa para sentirse valiosa y amada. La falta de confianza en uno mismo y en sus propias decisiones puede llevar a buscar constantemente la validación y el apoyo de los demás, creando una dependencia emocional.

Miedo al rechazo

El miedo al rechazo (o de no estar a la altura) puede impulsar a una persona a aferrarse a una relación, incluso si es disfuncional o poco saludable. El temor a quedarse solo/a o a no ser amado/a puede llevar a una búsqueda desesperada de atención y afecto, generando dependencia emocional en las relaciones.

Necesidad de llenar un vacío emocional

Las relaciones de dependencia emocional pueden surgir como una forma de llenar un vacío emocional dentro de uno mismo. Si hay una sensación de vacío o falta de satisfacción interna, es posible que se busque constantemente en los demás la gratificación emocional que se cree que falta. Esto puede llevar a depender emocionalmente de alguien para sentirse completo y en plenitud.

Inseguridad emocional

Las personas con inseguridad emocional pueden ser más propensas a desarrollar apegos afectivos disfuncionales. La falta de confianza en sus propias emociones y habilidades para manejarlas puede llevar a buscar en los demás una guía constante y una fuente de seguridad emocional.

Modelos de relación disfuncionales

Si hemos crecido en un entorno en el que hemos presenciado relaciones disfuncionales o hemos sido testigos de patrones de dependencia emocional en nuestras figuras de referencia, es más probable que internalicemos esos modelos y los repliquemos en nuestras propias relaciones personales.

Síntomas de dependencia emocional

Si alguna vez te has dicho a ti mismo “tengo dependencia emocional” quizás sea porque has detectado que algo no funciona como debería en tus relaciones afectivas. Para identificar a una persona considerada como dependiente emocional es importante observar qué síntomas presenta a nivel afectivo, cognitivo y comportamental. De este modo, podremos abordar mejor el problema y buscar soluciones efectivas. 

A continuación, te presentamos 7 síntomas de la dependencia emocional que pueden indicar la presencia de este problema psicológico.

1. Necesidad excesiva de atención y validación: las personas dependientes emocionales experimentan una constante necesidad de atención y validación de los demás. Buscan desesperadamente la aprobación y la confirmación de su valía personal, y su autoestima puede depender en gran medida de la atención que reciben.

2. Miedo al abandono: otra de las señales de dependencia emocional es el miedo intenso al abandono. Los dependientes emocionales temen ser dejados solos y harán todo lo posible para evitar el abandono, incluso si eso implica descuidar sus propias necesidades o permanecer en relaciones tóxicas.

3. Celos y posesividad: los individuos con personalidades dependientes pueden experimentar celos en la pareja y posesividad hacia esta u otras personas significativas. Estos sentimientos surgen del temor de perder a la persona en quien han depositado gran parte de su atención y afecto, y pueden tener dificultades para confiar plenamente en el otro.

4. Falta de autonomía emocional: la dependencia emocional se caracteriza por una falta de autonomía en las relaciones afectivas. Las personas con dependencia emocional tienen dificultades para manejar sus propias emociones de manera independiente y su bienestar emocional depende en gran medida de la presencia y la respuesta de los demás.

5. Idealización de la pareja: el enganche emocional que sufren las personas con dependencia afectiva suele basarse en la idealización de la pareja, atribuyéndole cualidades perfectas y colocándola en un pedestal. Esta idealización puede llevar a una falta de reconocimiento de las imperfecciones de la pareja y puede generar expectativas y una visión poco realista de la relación.

6. Sacrificio excesivo por el bienestar de la relación: los individuos que son dependientes emocionales tienden a sacrificarse en exceso por el bienestar de la relación. Pueden descuidar sus propias necesidades, deseos y metas con el fin de mantener la relación, lo que puede llevar a una dependencia emocional tóxica.

7. Consecuencias emocionales negativas: las consecuencias de la dependencia emocional pueden ser negativas, como ansiedad, baja autoestima y depresión. Estas emociones pueden surgir debido a la falta de satisfacción personal, la sensación de estar atrapado en relaciones disfuncionales y la falta de autonomía emocional.

Si te identificas con varios de estos síntomas, es posible que estés experimentando una dependencia emocional patológica o un trastorno de apego. Reconocer estos patrones y comportamientos es el primer paso para abordar este problema y buscar la ayuda y el apoyo terapéutico necesarios para establecer relaciones más saludables y equilibradas. 

Dependencia emocional: DSM 5 (criterios diagnósticos)

Cuando hablamos de dependencia emocional nos referimos únicamente a una forma de relación desequilibrada en la que una persona depende emocionalmente de otra para satisfacer sus necesidades y buscar validación. Aunque puede ser problemática y afectar negativamente a la vida y las relaciones, no es un trastorno mental específico reconocido en los manuales diagnósticos.

Sin embargo, también existe una variante patológica de la dependencia afectiva que afecta con mayor intensidad y duración a la persona: el trastorno de la personalidad dependiente, una forma de dependencia emocional grave que puede afectar a múltiples ámbitos de la vida y genera un elevado nivel de malestar e interferencia en el funcionamiento diario de la persona afectada, por lo que suele ser necesaria la intervención terapéutica especializada.

El trastorno de la personalidad dependiente es un diagnóstico clínico que describe un patrón persistente de dependencia emocional y necesidad excesiva de los demás. Los individuos con personalidades dependientes tienden a mostrar una falta de confianza en sí mismas, miedo al abandono y una gran necesidad de aprobación y apoyo constante. 

Según un estudio de la Universidad de Oviedo, el trastorno por dependencia emocional se asocia con un estilo de apego ansioso o apego ambivalente. Las personas con este estilo de apego han experimentado relaciones tempranas inseguras o inconsistentes, lo que les ha llevado a la formación de patrones de apego poco saludables.

Los criterios diagnósticos del Trastorno de la Personalidad Dependiente según el DSM 5 son los siguientes:

  • Necesidad excesiva de ser cuidado: la persona muestra una necesidad excesiva de que otros se ocupen de ella y se hagan cargo de las responsabilidades importantes en su vida diaria, mostrando una relación de dependencia excesiva.
  • Miedo al abandono: la dependencia emocional y el miedo al abandono pueden ir de la mano. En este caso, existe un miedo intenso en la persona a ser abandonada o dejada sola, incluso en situaciones en las que esto es poco probable.
  • Dificultad para tomar decisiones: la persona tiene dificultades para tomar decisiones cotidianas sin el constante consejo y reafirmación de los demás.
  • Dependencia en relaciones: se observa un patrón de sumisión y apego excesivo a figuras significativas de su vida, buscando desesperadamente su apoyo y validación.
  • Dificultad para expresar desacuerdo: la persona se muestra reacia a expresar desacuerdo o confrontar con los demás, por temor a perder su apoyo o afecto.
  • Dificultad para iniciar proyectos o hacer cosas por sí mismo: la persona tiene dificultades para iniciar o llevar a cabo proyectos por su cuenta debido a una falta de confianza en sus propias habilidades y juicio.
  • Búsqueda constante de cuidados: la persona busca constantemente la atención y el apoyo de los demás, incluso cuando no es necesario o adecuado.
  • Sentimientos de incompetencia: existe una percepción persistente de ser incompetente o de no poder enfrentar la vida sin la ayuda de los demás.
  • Preocupación excesiva por el abandono: la persona está constantemente preocupada por el temor de ser dejada o abandonada, y hará todo lo posible por evitarlo.
  • Disminución de la autonomía: se observa una falta de iniciativa y autonomía en la toma de decisiones y en la vida diaria, dependiendo en gran medida de los demás.

Para que un profesional pueda diagnosticar un trastorno de la personalidad dependiente, además de cumplirse los criterios anteriores, estos deben comenzar al principio de la edad adulta y tienen que estar presentes en diferentes contextos de la vida de la persona afectada.

Cómo tratar y superar la dependencia emocional
Foto de Leah Kelley (Pexels)

Cómo superar la dependencia emocional

Superar la dependencia emocional requiere tiempo, esfuerzo y autodescubrimiento. Aquí te ofrecemos algunas estrategias y consejos prácticos que te pueden servir para poner fin a las ataduras afectivas. Ten en cuenta, eso sí, que en ocasiones y en función de la gravedad del problema es necesario contar con la ayuda de un profesional capacitado para salir de la dependencia emocional.

A continuación, exploraremos algunas claves para superar la dependencia emocional y recuperar la autonomía personal. No obstante, en función de la gravedad de los síntomas, es recomendable consultar con psicólogos especialistas en dependencia emocional para que lleven a cabo una evaluación y te orienten sobre la mejor forma de abordar el problema.

  • Reconoce el problema: sé honesto contigo mismo/a. Acepta que necesitas hacer cambios y estás dispuesto/a a enfrentar el desafío de superarlo. El autoanálisis y la autoconciencia son fundamentales para iniciar el proceso de cambio.
  • Busca apoyo profesional: Considera la ayuda de un psicólogo o terapeuta especializado en apego y dependencia emocional. Ellos pueden brindarte las herramientas necesarias para comprender tus patrones de apego y trabajar en tu crecimiento personal.
  • Desarrolla tu autoestima: cultivar una imagen positiva de ti mismo y valorar tus propias cualidades fortalece la autoestima, lo que a su vez, según un estudio científico de la Universidad de Comillas, favorece el apego emocional saludable.
  • Establece límites saludables: aprende a decir "no" cuando sea necesario y a establecer límites en tus relaciones. Reconoce tus necesidades y respétalas para desarrollar un apego emocional saludable.
  • Aprende a estar solo/a: dedica tiempo a conocerte a ti mismo/a, desarrolla tus intereses y disfruta de tu propia compañía. La independencia emocional es clave para superar las relaciones de dependencia.
  • Busca actividades que te hagan feliz: encuentra pasatiempos, hobbies o actividades que te brinden satisfacción y te ayuden a desarrollar una identidad propia.
  • Aprende a manejar la ansiedad: practica técnicas de relajación, meditación o mindfulness para controlar la ansiedad y los pensamientos negativos relacionados con la dependencia emocional.
  • Practica el autocuidado: prioriza tu bienestar físico, mental y emocional. Cuida de ti mismo/a mediante una alimentación saludable, ejercicio regular, descanso adecuado y actividades que te brinden placer y relajación. Cuanto más te cuides a ti mismo/a, más fortaleza y equilibrio encontrarás en tu vida.

Además de estos consejos para superar la dependencia emocional, también puedes poner en práctica actividades que te ayudarán a reforzar tu autoestima y confianza. Por ejemplo, uno de los ejercicios para superar la dependencia emocional consiste en crear una lista de afirmaciones positivas sobre ti mismo/a y repetirlas diariamente; también puedes practicar la identificación de tus límites personales y comunicarlos de manera clara y asertiva a otras personas, como tus amigos o familiares. 

Con todo, recuerda que cada persona es única y la superación de la dependencia emocional puede resultar más o menos compleja en función de la gravedad del problema y de las características individuales. Lo importante es ser paciente contigo mismo/a y buscar ayuda profesional cuando sea necesario.

Dependencia emocional: tratamiento

A la pregunta de si se puede curar la dependencia emocional no podemos dar una respuesta tajante, pero sí podemos afirmar que con un trabajo constante y el apoyo adecuado es posible dejar atrás esos vínculos dañinos y construir un apego afectivo más saludable.

En los casos en los que existe una dependencia afectiva patológica es necesario solicitar ayuda profesional. Los psicólogos expertos en dependencia emocional pueden ser los aliados perfectos en este proceso. Ellos son quienes tienen los conocimientos y las herramientas necesarias para guiarte en el camino hacia la sanación emocional. 

El tratamiento de los distintos tipos de dependencias emocionales implica explorar los patrones de pensamiento y comportamiento, identificar las raíces de ese apego emocional poco saludable y aprender nuevas formas de relacionarse.

Estas son algunas de las técnicas psicológicas para la dependencia emocional y los tratamientos disponibles para abordar esta problemática:

  • Terapia cognitivo conductual para dependencia emocional (TCC): la TCC se enfoca en identificar y cambiar los patrones de pensamiento y comportamiento negativos que contribuyen a la dependencia afectiva. Se utilizan distintas técnicas para trabajar la dependencia emocional, como desafiar las creencias irracionales y desarrollar estrategias de afrontamiento para promover cambios positivos en la conducta.
  • Terapia de pareja: en los casos en los que las relaciones de dependencia se dan en el ámbito de la pareja, se ha demostrado que la terapia cognitivo conductual también es eficaz para trabajar la dependencia emocional y la regulación afectiva. Se abordan los problemas de un apego emocional poco saludable y se trabaja en la comunicación, el establecimiento de límites y la construcción de una relación más equilibrada.
  • Mindfulness y técnicas de relajación: el uso de técnicas de relajación, como la meditación y el mindfulness o el entrenamiento autógeno, puede ayudar a reducir la ansiedad, promover la autorreflexión y mejorar la capacidad para lidiar con las emociones de manera saludable.

Además de la terapia, hay otras actividades para trabajar la dependencia emocional. Por ejemplo, puedes escribir un diario reflexionando sobre tus relaciones pasadas y cómo has superado situaciones difíciles; o puedes escribir cartas dirigidas a ti mismo, relatando tu historia y escribiendo sobre aquello que quieres mejorar en tus relaciones, cómo establecer límites o priorizar tus propias necesidades frente a las de otros. 

Explorar actividades creativas como la pintura, la música o la danza también puede ser una forma de expresión y liberación emocional. Además, puedes echar mano de manuales de autoayuda o guías prácticas que proporcionan ejercicios y consejos para fortalecer la independencia emocional y construir relaciones más saludables.

Libros sobre dependencia emocional

Uno de los recursos que pueden ayudarte a afrontar el desafío de una relación de dependencia es la lectura. Hay libros que exponen ejemplos de dependencia emocional y proporcionan información valiosa que puede ayudarte a comprender y superar este problema. 

A continuación, te presentamos algunos de los mejores libros sobre dependencia emocional:

  • "Mujeres que aman demasiado" de Robin Norwood: este clásico de la psicología aborda específicamente la dependencia emocional en las mujeres y examina los patrones de comportamiento y las creencias que llevan a una persona a amar de manera excesiva y a perderse a sí misma en relaciones poco saludables.
  • "Dependencia emocional: características y tratamiento" de Jorge Castelló Blasco: en esta obra, el autor explora en profundidad los patrones y dinámicas de dependencia emocional en las relaciones y ofrece una mirada comprensiva y clara sobre cómo el apego emocional tóxico puede afectar nuestra vida y bienestar emocional.
  • "Amar o depender: cómo superar el apego afectivo y hacer del amor una experiencia plena y saludable" de Walter Riso: en este libro, el autor aborda de manera clara y directa el enganche emocional en las relaciones amorosas. Riso explora los patrones de conducta y creencias que llevan a depender emocionalmente de alguien, y ofrece herramientas valiosas y ejemplos prácticos para romper con este patrón y establecer relaciones más saludables.   

Estas obras ofrecen conocimientos, perspectivas y estrategias prácticas para abordar la dependencia afectiva de manera eficaz. Además, en estos libros puedes encontrar frases de dependencia emocional que pueden hacernos reflexionar y ayudarnos a adquirir una mayor conciencia de los patrones y dinámicas relacionales que te impiden ser emocionalmente independiente.

Recuerda que puedes confiar en el apoyo de nuestro equipo de psicólogos y psicólogas, quienes te brindarán orientación y te ayudarán a comprender qué provoca la dependencia emocional y qué pasos seguir para comenzar a superar este desafío.

Si decides dar el primer paso hoy mismo, solo tienes que completar el cuestionario personalizado diseñado para entender tus necesidades específicas y adaptar el tratamiento. 

El camino hacia la libertad y la autonomía emocional está al alcance de tus manos. ¡Adelante!

Bibliografia

Este contenido es de tipo divulgativo y no puede reemplazar el diagnóstico de un profesional. Artículo revisado por nuestra redacción clínica

Te pueden interesar

El enamoramiento: un suspiro inexplicable entre neurobiología y psicología
Relaciones de pareja

El enamoramiento: un suspiro inexplicable entre neurobiología y psicología

Miedo al rechazo: causas y estrategias para superarlo
Relaciones de pareja

Miedo al rechazo: causas y estrategias para superarlo

Sentimiento de soledad: qué es, cómo reconocerlo y cuándo pedir ayuda
Relaciones de pareja

Sentimiento de soledad: qué es, cómo reconocerlo y cuándo pedir ayuda

VER TODOS LOS ARTÍCULOS