Aunque la mayoría de la gente lo más probable es que nunca haya oído hablar de la psicosis puerperal, si tú estás aquí es porque conoces en primera persona, o a través de alguien cercano, que la psicosis postparto existe. El nacimiento del bebé y la maternidad van asociadas a ese momento de pura alegría y felicidad, así que se asume la celebración, las felicitaciones y se da por sentado que los recientes padres, y en particular la madre, estén en el séptimo cielo, pero ¿realmente siempre es así?
En efecto, la llegada de un bebé puede despertar emociones y sentimientos encontrados, y no es raro oír hablar de padres primerizos en crisis o de madres primerizas que experimentan una mezcla de felicidad y miedo, alegría y ansiedad ante lo que les espera. Entre los retos está el nuevo papel que hay que asumir y los cambios en la relación de pareja tras el nacimiento de un hijo. Pero, ¿cuándo se convierte todo esto en un grave problema para la salud psicológica de la madre?
Los temores de una mujer que va a dar a luz pueden manifestarse:
- Antes del parto o durante el parto, como en el caso de la tocofobia.
- Después del parto las nuevas madres pueden sentirse tristes, perdidas y asustadas.
A estas alturas estamos acostumbrados a oír hablar de uno de los tipos de depresión más conocidos como es la depresión postparto y baby blues, pero a veces el cuadro sintomático es mucho más grave, llegando a la psicosis puerperal. En este artículo, profundizaremos sobre la psicosis postparto esbozando su definición, posibles causas, síntomas y opciones de tratamiento.
Psicosis puerperal: qué es
La psicosis postparto forma parte de los trastornos que se dan en el periodo perinatal, en el que también encontramos depresión (después o durante el parto).
Imaginemos un flujo continuo que sitúa la depresión postparto en un lado y la psicosis postparto en el otro. Los trastornos perinatales no tienen una clasificación independiente en la CIE-10 ni en el DSM-5, pero su característica común es precisamente su aparición en el periodo "alrededor" del parto.
En la etapa postnatal alrededor del 85% de las mujeres padecen algún tipo de trastorno del estado de ánimo y, de ellas, entre el 10 y el 15% presentan síntomas incapacitantes de ansiedad y depresión. El trastorno más grave que puede aparecer en el periodo postnatal es la psicosis puerperal y que el DSM-5 define como un trastorno psicótico que tiene su inicio en las cuatro semanas posteriores al parto.
En cuanto a los aspectos epidemiológicos, la psicosis postparto es, afortunadamente, poco frecuente. Hablamos de una incidencia del 0,1 al 0,2%, es decir, 1-2 nuevas madres por cada 1000. ¿Qué mujeres tienen más probabilidades de desarrollar una psicosis puerperal?
Según un estudio se ha observado que existe una asociación entre el trastorno bipolar y la psicosis postparto. Sin embargo, la psicosis puerperal también puede producirse dentro de un cuadro depresivo, sin características bipolares (hablamos de psicosis depresiva postparto). Pero veamos más de cerca cuáles son las causas de la psicosis postparto.
Psicosis postparto: las causas
En la actualidad, no se han identificado factores etiológicos que conduzcan inequívocamente a la psicosis puerperal. Por lo tanto, más que de causas reales de la psicosis puerperal, se puede hablar de factores de riesgo y de protección.
Los antecedentes positivos de trastorno bipolar, trastorno límite de la personalidad o tener antecedentes familiares o antecedentes de trastornos psicóticos pueden ser indicadores a tener en cuenta.
Como se recoge en un artículo de la revista Psychiatry Today, padecer una enfermedad tiroidea autoinmune y ser madre primeriza también parecen ser factores de riesgo. En cambio, tener una pareja que te apoye parece ser un elemento protector contra la psicosis postparto.
Contrariamente a lo que el sentido común podría hacer pensar, haber tenido complicaciones durante el embarazo o el parto, así como el tipo de parto (cesárea o vaginal) no son causas de psicosis puerperal.
Psicosis puerperal: síntomas y características
La psicosis postparto puede presentar, además de los síntomas depresivos, lo siguiente:
- desorganización del pensamiento;
- alucinaciones;
- delirios predominantemente paranoides (psicosis paranoide postparto);
- trastornos del sueño;
- agitación e impulsividad;
- cambios de humor;
- preocupación obsesiva hacia el niño.
La psicosis postparto también puede tener efectos en el niño debido a la dificultad para establecer una relación madre-hijo. Esto podría tener graves consecuencias para el desarrollo emocional, cognitivo y conductual del niño, incluso a largo plazo.
De hecho, el recién nacido se convierte en el centro alrededor del cual se desarrollan las ideas delirantes y paranoicas de la madre. Es por esto que los síntomas de la psicosis postparto pueden tener consecuencias muy graves como el suicidio y el infanticidio (piénsese en el llamado Síndrome de Medea) y por eso es muy importante la evaluación de la ideación suicida y heteroléptica.
Pero, ¿cuánto dura la psicosis postparto? Si se interviene a tiempo, la mayoría de las personas con este trastorno se recuperan totalmente entre seis meses y un año después del inicio, mientras que la gravedad de los síntomas suele disminuir antes de los tres meses posteriores al parto.
A partir de estudios en los que participaron mujeres con experiencias de psicosis postparto, sabemos que para la mayoría de ellas la remisión es completa, aunque el riesgo de que la psicosis puerperal aparezca en un futuro embarazo o en una psicosis posterior no postparto sigue siendo alto.
Psicosis postparto: terapia
Para el tratamiento de la psicosis puerperal, como decíamos, es necesario intervenir lo antes posible para que el trastorno se resuelva en un plazo relativamente breve. Las directrices del NICE (2007) sobre la psicosis puerperal sugieren que si aparecen síntomas, la mujer debe ser llevada a un servicio de salud mental para una evaluación temprana.
Esto se debe a que la nueva madre pierde el contacto con la realidad y le resulta imposible darse cuenta de los signos del trastorno y aceptar el diagnóstico y, en consecuencia, el tratamiento, sin el apoyo adecuado. ¿Qué terapia es la más adecuada? La psicosis postparto se cura con un tratamiento que, dada su gravedad, requiere:
- hospitalización;
- intervención farmacológica (psicofármacos);
- psicoterapia.
En caso de hospitalización por psicosis postparto, el tratamiento no debe excluir la posibilidad de mantener el contacto con el niño, para favorecer la creación de un vínculo de apego. También será muy importante la sensibilidad, el apoyo y la intervención de quienes rodean a la nueva madre, que a menudo puede sentirse juzgada y acusada de no estar a la altura.
En cuanto a los fármacos, tanto su prescripción como su control, deben ser seguidos por un psiquiatra. Por lo general, en el postparto se prefieren los mismos fármacos que se utilizan para tratar un episodio psicótico agudo, prestando mayor atención a los que provocan un aumento de la prolactina (sobre todo en el caso de las mujeres que no pudieron gestionar la lactancia materna). Además, buscar ayuda psicológica con un psicólogo perinatal puede ser útil para controlar los síntomas y prevenir las recaídas.