A menudo, caemos en el error de asociar la palabra droga únicamente a sustancias ilegales y dejamos de lado otras sustancias, como la nicotina o el alcohol, por ser legales y de fácil acceso. Pero el término droga hace referencia a todas aquellas sustancias que, cuando se introducen en el organismo, actúan sobre el sistema nervioso central y provocan cambios que afectan a la conducta, al estado de ánimo o la percepción y, además, causan adicción.
Sigue leyendo para conocer los diferentes efectos de las drogas a largo plazo en el cuerpo humano y en el sistema nervioso.
¿Cuáles son las causas y las consecuencias del consumo de drogas?
Empecemos por la definición que hace la Organización Mundial de la Salud de las drogas:
"Una droga es cualquier sustancia que, al ser inhalada, inyectada, fumada, ingerida, disuelta bajo la lengua, absorbida a través de un parche en la piel o de las mucosas, provoca un cambio psicofísico temporal en el sujeto, su estado de ánimo y sus actividades mentales".
Todas estas sustancias psicoactivas activan un complicado circuito de neuronas responsable del placer (se denomina psicoactiva a toda sustancia química que, al introducirse por cualquier vía y luego pasar al torrente sanguíneo, ejerce un efecto directo sobre el sistema nervioso central y ocasiona cambios específicos en sus funciones).
¿Qué pasa cuando se consume droga? Se activa el sistema de gratificación cerebral, que proporciona un nivel importante de satisfacción y por eso el consumo acabará resultando difícil de controlar. Y el abuso del consumo de drogas llevará a la adicción, tanto física como psíquica:
- La dependencia psíquica se vincula con la idea de no poder seguir viviendo sin el consumo de droga. Genera síntomas de abstinencia emocionales-motivacionales como, por ejemplo, un estado de malestar o insatisfacción frecuente y una menor capacidad de experimentar placer o ansiedad.
- La dependencia física se desencadena por la capacidad de las drogas que tienen las drogas de alterar algunos procesos importantes del cerebro. El organismo se adapta a la presencia de la sustancia y no puede prescindir de ella. En caso de abandonar el consumo de droga, o de proporcionarle al organismo una cantidad inferior, es cuando se produce la crisis de abstinencia.
Los efectos de las drogas en las personas
El abuso de drogas provoca efectos a corto y largo plazo en la salud. Las drogas no solo afectan al cuerpo, también pueden afectar a la salud mental de la persona, a sus relaciones laborales, familiares, de pareja, a su vida social y, por supuesto, a su economía.
Cuando hablamos de los efectos de las drogas en el organismo hay que tener en cuenta que estos, dependiendo del tipo de droga, serán diferentes. Hay una clasificación de drogas según su efecto. Mientras unas generan energía y hacen que la persona se sienta más despierta, otras dan una sensación de relajación y calma. Las hay que causan alucinaciones y otras que entumecen el cuerpo.
El consumo prolongado y la cantidad de dosis también influyen en los efectos físicos y psicológicos que causan las drogas. Más allá de las consecuencias en uno mismo, también hay que considerar en caso de padres drogadictos las consecuencias en sus hijos.
Efectos de las drogas en el sistema nervioso
Los efectos negativos de las drogas en el sistema nervioso son diversos. Sus principales víctimas son los neurotransmisores, las sustancias que permiten que nuestro sistema cerebral funcione correctamente como la endorfina, la serotonina y la dopamina.
El consumo de cocaína, por ejemplo, altera el córtex prefrontal, la zona que controla el comportamiento y la capacidad de decisión, hasta el punto de provocar convulsiones y sufrimientos comparables a los de la esquizofrenia paranoide. El efecto de las drogas sobre el sistema nervioso es muy insidioso, ya que ese breve placer inicial cuesta lapsos de memoria en el cerebro comparables a los de los ancianos, lo que conduce a la demencia temprana y al Alzheimer.
Entre los efectos negativos de las drogas en el sistema nervioso destacan:
- Alteración del funcionamiento cerebral que cambia la producción, la liberación o la degradación de los neurotransmisores cerebrales. Provoca la modificación del proceso natural de intercomunicación neuronal.
- La disminución de la capacidad de aprendizaje, de memorización, la capacidad afectiva y el juicio crítico. Se ha observado que también afecta a los circuitos cerebrales involucrados en la motivación y la toma de decisiones.
- Entre los efectos del consumo de drogas en personas jóvenes hay un menor control de los impulsos, dificultades para coordinar bien sus movimientos y tendencia a la agresividad. En personas muy jóvenes los efectos psicológicos de las drogas pueden ser graves, por ejemplo: el consumo de marihuana y similares, hace que exista un mayor peligro de sufrir trastornos psicológicos y psiquiátricos que pueden desembocar en la esquizofrenia.
El efecto de las drogas en el cerebro
Las drogas pueden alterar zonas importantes del cerebro que son necesarias para las siguientes funciones vitales:
- Los ganglios basales: cumplen una función importante en las formas positivas de motivación.
- La amígdala extendida: cumple una función en las sensaciones estresantes como la ansiedad, la irritabilidad y la inquietud.
- La corteza prefrontal: dirige la capacidad de pensar, planificar, resolver problemas, tomar decisiones y controlar los propios impulsos.
El abuso de drogas puede alterar la estructura y el funcionamiento del cerebro de una persona, lo que provoca efectos psicológicos a largo plazo como:
- depresión;
- ansiedad;
- trastorno de pánico;
- aumento de la agresividad;
- paranoia;
- disociación (despersonalización/desrealización);
- alucinaciones.
Además, el consumo de drogas genera cambios de humor, episodios de psicosis (pérdida de contacto con la realidad) y, como ya se ha mencionado antes, a largo plazo también afecta a la memoria, al aprendizaje y a la concentración.
Bajo los efectos de la droga también se crea una memoria distorsionada de las percepciones y sensaciones. Otro daño que causa la droga es el alejamiento de los seres queridos y amigos.
Efectos físicos de las drogas
Hay otros efectos de las drogas a corto y largo plazo, que pueden llevar a consecuencias físicas:
- Las drogas pueden conducir a comportamientos de riesgo como la conducción temeraria. Las drogas afectan gravemente a la capacidad de atención, impidiendo la destreza, el estado de alerta y los reflejos, normalmente necesarios para una conducción adecuada y segura.
- Mayor probabilidad de cometer agresiones u otros actos violentos..
- Experimentar dificultades para dormir (puede ser una de las causas de insomnio), para pensar, razonar, recordar y resolver problemas.
- Daños en el sistema nervioso y en órganos: garganta, estómago, pulmones, hígado, páncreas, corazón y cerebro.
- Enfermedades infecciosas por inyecciones compartidas.
- Acné o lesiones cutáneas. Los efectos de las drogas en la cara pueden ser los primeros signos identificables del abuso de estas sustancias y de las enfermedades sistémicas relacionadas.
- Marcas de agujas y venas quemadas. Son los efectos más visibles del consumo de droga en la piel, como líneas de pequeños puntos oscuros (pinchazos) rodeados de una zona de piel oscurecida o aclarada.
- Calvicie.
- Crecimiento de vello facial (en el caso de las mujeres).
- Problemas en la mandíbula y en los dientes por apretar y rechinar los dientes. Las caries, la pérdida de dientes, la inflamación de las encías y la halitosis son algunos de los efectos más comunes de las drogas en la dentadura.
Los tipos de drogas y sus efectos
Según los tipos de drogas, sus efectos y consecuencias varían. Veamos qué tipos de drogas existen y cuales son sus efectos.
Un estudio de Statista informa sobre el consumo por tipos de droga consumida en España durante 2019:
- Más del 77% de los españoles consumió alcohol en algún momento.
- El consumo de tabaco se quedó por debajo del 40%.
(Sí, el alcohol y el tabaco son tipos de drogas, en este caso legales, y causan adicción -por eso es habitual una recaída en el tabaco o en el alcohol tras dejarlos de consumir-).
- El cannabis fue el tipo de droga más consumida por los encuestados, en concreto por un 10,5%.
- La cocaína, por su parte, fue consumida por un 2,5%.
A continuación, repasamos las drogas más comunes, sus efectos y sus consecuencias.
Efectos de los cannabinoides
Un cannabinoide es un compuesto orgánico que pertenece al grupo de los terpenofenoles y activa los receptores cannabinoides en el organismo humano. Los cannabinoides más conocidos del cannabis son el cannabidiol (CBD) y el tetrahidrocannabinol (THC), el principal compuesto psicoactivo de la marihuana.
Los efectos principales de estas sustancias son una euforia moderada, relajación, intensidad en las experiencias (aunque se pueden vivir negativamente con paranoias, ataques de angustia). Una vez pasada la fase de euforia, pueden aparecer ataques de ansiedad, miedo, desconfianza en los demás y pánico.
Los efectos secundarios de esta droga pueden ser la somnolencia, los cambios en la percepción espacio-temporal (en general, conducir bajo los efectos de las drogas es peligroso y en el caso del cannabis es especialmente peligroso), la agitación, irritación, conjuntivitis, midriasis (pupilas dilatadas). También se han documentado efectos cardiovasculares como taquicardia y cambios en la presión arterial.
Efectos del alcohol
El alcohol es uno de los tipos de drogas más consumidas, y sus efectos son bastante conocidos. El alcohol que encontramos en las bebidas se llama etanol. Es una molécula fácilmente soluble en agua y de pequeño tamaño que puede alterar la actividad mental.
Un porcentaje del etanol es absorbido inmediatamente por el estómago y los intestinos, sin necesidad de digestión. De ahí pasa directamente al torrente sanguíneo, por eso tomarlo con el estómago vacío hace que sus efectos se manifiesten antes y con más intensidad. Sin embargo, alrededor de un 90% del alcohol se metaboliza en el hígado, motivo por el que causa tanto daño hepático (cirrosis).
La circulación del alcohol en el torrente sanguíneo hace que sus sustancias lleguen al corazón, a los riñones y al cerebro, donde los efectos más notables son los cambios en el estado de ánimo, el comportamiento, el pensamiento y el movimiento. Tras su consumo se suele dar la llamada resaca con náuseas.
En pequeñas dosis el alcohol actúa como estimulante y sedante, por lo que genera una sensación de bienestar e induce a socializar (es una de las causas por las que los adolescentes lo toman, para sentirse más seguros en situaciones sociales).
El consumo de alcohol durante el embarazo conlleva riesgos para el bebé: síndrome de abstinencia, síndrome de la muerte súbita, infecciones, malformaciones congénitas, problemas de aprendizaje y de comportamiento, y también trastornos del espectro del alcoholismo fetal (TEAF), como el síndrome del alcoholismo fetal (SAF) y TDAH.
Efectos de las anfetaminas
Las anfetaminas son legales cuando las receta un médico y se utilizan para tratar algunos problemas de salud, pero son ilegales sin prescripción médica y para uso recreativo.
Las anfetaminas pertenecen a la categoría de drogas estimulantes. Aumentan la presencia de serotonina, por lo que generan una gran adicción, y este aumento provoca varios efectos psicológicos: una fuerte sensación de bienestar, una mayor desinhibición con los demás, elimina las barreras emocionales y de comunicación, produce un aumento de las sensaciones y una mayor capacidad para percibir el ritmo y la música.
El efecto excitante de las anfetaminas incluye: hiperactividad, reducción de la sensación de fatiga, logorrea, disminución del apetito, agresividad, impulsividad, hasta llegar a la psicosis total con crisis maníacas, delirios y alucinaciones, aumento de la actividad del sistema cardiovascular con riesgo de arritmias, infartos y hemorragias cerebrales. Los efectos de las drogas en el organismo, como puedes ver, pueden llegar a ser devastadores.
Efectos de las metanfetaminas (Éxtasis/MDMA)
Las metanfetaminas (éxtasis/MDMA) son compuestos estimulantes y alucinógenos. Tienen un efecto excitante. Predomina el efecto de despreocupación en las relaciones interpersonales, la desinhibición, la disminución del juicio respecto a las situaciones vividas y respecto a las propias acciones.
Su uso en dosis elevadas, sobre todo si es continuado, suele ir seguido de un periodo de "colapso psicofísico". Cuando el efecto desaparece, las sensaciones previamente calmadas se amplifican y uno se siente agotado, exhausto, irritable, deprimido.
La adicción a este tipo de droga es exclusivamente psicológica. Uno de los peligros más graves de esta clase de sustancias es su elevada neurotoxicidad. Amplios estudios han demostrado la degeneración irreversible de las neuronas productoras de serotonina que, en la práctica, se "queman". En los casos en que las células degeneradas vuelven a crecer, se ha observado que este crecimiento da lugar a neuronas "mutadas" e inactivas.
Otros estudios recientes han observado cómo los efectos a largo plazo del consumo de éxtasis incluyen no solo patologías neuropsiquiátricas relacionadas con la disminución de la serotonina, sino también las relacionadas con la deficiencia de dopamina, como la enfermedad de Parkinson.
También se han notificado episodios, a menudo mortales, relacionados con la psicosis paranoica, el colapso cardiovascular, la hemorragia cerebral y el infarto. Se han observado otros efectos nocivos de esta droga a largo plazo en los consumidores asiduos, como el desarrollo de daños hepáticos e hipertermia.
Efectos de la cocaína
La cocaína entra dentro de la clasificación de drogas estimulantes. Proporciona al consumidor una sensación de euforia y excitación, seguida de energía y confianza. Genera una adicción rápida.
Entre los efectos físicos de esta droga: dilatación de las pupilas y enrojecimiento de los ojos. Puede causar complicaciones médicas como infartos causados por la vasoconstricción y los espasmos y crisis hipertensivas que pueden provocar una hemorragia cerebral.
El consumo durante el embarazo provoca crecimiento deficiente del feto, complicaciones durante la gestación debido a la acción vasoconstrictora (aborto, desprendimiento de la placenta), crecimiento intrauterino retardado (CIR), prematuridad, malformaciones en el feto.
En esta clasificación de drogas también entra la cocaína crack. Se concibió y sintetizó originalmente como un sustituto de la cocaína porque el consumo nasal provoca la destrucción de los tejidos nasales, por lo que la inhalación era el único modo alternativo de ingesta. Su consumo continuado y prolongado puede provocar psicosis, estados paranoicos acompañados de delirios y alucinaciones, agresividad y alienación.
Efectos de la heroína
La heroína es una droga opioide producida a partir de la morfina, una sustancia natural que se extrae de la semilla de la amapola, también conocida como "adormidera asiática".
Una de las consecuencias perjudiciales de esta droga es que es altamente adictiva. Al principio, sus efectos son muy placenteros, lo que propicia una conducta de consumo continuado y repetido.
Los efectos inmediatos de esta droga son: sensación de placer muy intensa, estado de sedación, cierta euforia y ausencia de cualquier malestar psíquico. Sus efectos duran aproximadamente 2-3 horas y desaparecen de forma progresiva.
Entre los efectos de esta droga a largo plazo: desórdenes en la nutrición (adelgazamiento), alteraciones cardiovasculares y de la sangre, alteraciones psicológicas como la apatía (falta de interés), la depresión, el egocentrismo (estar centrado en sí mismo, necesidad de ser el centro de atención), alteraciones ginecológicas (trastornos en la menstruación y ovulación) y efectos en el sistema nervioso (trastornos de atención, memoria e insomnio).
Además, conlleva el riesgo de transmisión de enfermedades infecciosas (hepatitis víricas, tuberculosis, VIH/sida) cuando se comparten o reutilizan utensilios de consumo.
Uno de los riesgos de las drogas, como en el caso de la heroína, es la sobredosis. La interrupción del consumo conlleva la aparición de un fuerte síndrome de abstinencia.
Efectos de LSD
El LSD actúa tanto en el sistema nervioso central como en el periférico produciendo alucinaciones auditivas y visuales y, en general, distorsiones de la percepción y de la conciencia del tiempo, el espacio y el yo. Los efectos de esta droga varían mucho en función de la dosis y del estado psicológico en el momento de la ingesta.
En pequeñas dosis causa risa y alteración suave de la percepción. En dosis altas modifica el estado de conciencia y produce el llamado “viaje psicodélico”, sensación de separación corporal y de sentirse en sintonía con el universo, percepción intensificada de sonidos, colores, olores y sabores.
Al igual que con otros alucinógenos, los adictos corren el riesgo de sufrir los llamados "malos viajes", que son experiencias desagradables o incluso aterradoras con episodios de ansiedad, angustia y pánico.
En algunas personas, el consumo de LSD puede generar fenómenos de flashback, es decir, la reaparición repentina del "viaje" algún tiempo después de la última ingesta y la incapacidad de distinguir entre la percepción y la realidad que lleva a la sobreestimación de las propias capacidades (por ejemplo, creer que se puede volar, etc.).
Efectos de la ketamina
La ketamina se usa clínicamente como anestésico general, pero en los últimos años hay quienes la han empezado a consumir en ambientes nocturnos y sin finalidad terapéutica, sino como droga recreativa.
Sus efectos en dosis bajas: sensación de borrachera y desequilibrio. Si el consumo se hace con dosis altas entonces se produce una desrealización (fuerte alucinación por efectos disociativos, separación cuerpo-mente), produce movimientos involuntarios de los ojos, temblores, agitación y rigidez. Además, tiene efectos en la salud mental: ansiedad, depresión, paranoia, y provoca insensibilidad al dolor y entumecimiento.
¿Cuáles son los efectos de las drogas en la sociedad?
Sobre los efectos sociales del consumo de drogas, la psicóloga Ambra Lupetti —miembro del equipo clínico de Unobravo— nos hace la siguiente reflexión: “ Las drogas no solo perjudican directamente a las personas que las consumen y hacen que las relaciones con sus seres queridos sean muy difíciles y a veces dolorosas, sino que también tienen efectos considerables desde el punto de vista de la sociedad. A menudo, quienes están bajo los efectos de las drogas pueden causar un aumento de incidentes de violencia tanto en el hogar como en público.
El consumo de sustancias psicotrópicas también está relacionado con un mayor número de accidentes de tráfico y de víctimas mortales debido a una conducción alterada. Y si hablamos de más consecuencias del consumo de droga, también hay que incluir mayores costes desde el punto de vista de la salud pública y en términos de reducción de la productividad en el trabajo.”
¿Cómo obtener ayuda?
La adicción es el hábito de conductas peligrosas o de consumo de determinados productos (adicción a la comida, adicción al sexo o ninfomanía en mujeres, adicción afectiva, adicción a videojuegos…) como es el caso de las drogas, y no se puede prescindir de su consumo o resulta muy difícil hacerlo por razones de dependencia psicológica o incluso fisiológica, así que hay que pedir ayuda.
La adicción a los diferentes tipos de drogas es, en muchos casos, extremadamente difícil de combatir, y encontrar un psicólogo adecuado y un programa de tratamiento pueden ser tareas desalentadoras. Sin embargo, dejar las drogas es posible y es importante iniciar el camino hacia la desintoxicación lo antes posible, acudir a un psicólogo puede ser de gran ayuda.
En nuestro país, las comunidades autónomas suelen tener programas y servicios de atención telefónica.:
- La Comunidad de Madrid cuenta con el Servicio de Prevención de Adicciones (PAD), que proporciona orientación y atención a los problemas derivados del consumo de alcohol y/u otras drogas y otras conductas adictivas.
- En Catalunya está disponible el servicio gratuito de la Línea Verde para realizar consultas de todo tipo relacionadas con las drogas. Ofrece información, orientación y asesoramiento, derivación (si procede) a recursos especializados de tratamiento y atención presencial con cita previa para orientar la demanda planteada. También cuenta con el Servicio de Orientación sobre Drogas (SOD) para jóvenes consumidores (hasta los 21 años) y los Centros de Atención y Seguimiento (CAS) para mayores de edad.
Como decíamos, en el camino hacia la desintoxicación el apoyo psicológico es importante y entre los beneficios de ir al psicólogo sin duda están las herramientas y consejos que ayudan a superar la adicción.