¿Alguna vez has vivido una situación en la que sentiste que tu vida estaba en peligro?
Catástrofes naturales, accidentes de tráfico, atentados o conflictos bélicos… son las primeras situaciones que nos vienen a la cabeza cuando hablamos de experiencias traumáticas. Lo cierto es que existen vivencias muy diferentes en grado de provocar síntomas de fuerte estrés: el maltrato infantil, la violencia de género y el maltrato psicológico, en general, son ejemplos muy claros de cómo episodios traumáticos del pasado pueden revivir a través de sueños (en ocasiones, el significado de los sueños puede estar ligado a los hechos traumáticos) y pensamientos recurrentes dando lugar a un desorden de estrés postraumático que puede llegar a influenciar nuestras vidas (esto es, por ejemplo, lo que les ocurrió a algunas personas que participaron en el experimento de la cárcel de Stanford, por estar expuestas a experiencias de violencia y sumisión extremas).
Es normal que tras vivir situaciones de peligro y miedo como las descritas anteriormente, puedan presentarse eventos postraumáticos además de otras dificultades transitorias. Sin embargo, con el tiempo y siempre que sea posible, desarrollar estrategias de coping adecuadas puede ayudar a mejorar los síntomas del bloqueo por estrés postraumático y a recuperar la calma. Coping se refiere a los mecanismos que utilizamos para enfrentar el estrés y las adversidades, y su implementación es clave en el proceso de recuperación del TEPT.
Pero ¿qué ocurre si los síntomas no desaparecen con el tiempo? Si pasan meses, o incluso años, y seguimos conviviendo con algunos síntomas de estrés postraumático como insomnio, ansiedad, pesadillas o la incapacidad de disfrutar de las cosas buenas de la vida o el miedo a la muerte, se puede hablar de trastorno por estrés agudo o bien de trastorno de estrés postraumático (TEPT).
A lo largo de este artículo, veremos cuáles son los síntomas del estrés postraumático y sus secuelas, las posibles causas de un shock postraumático y cómo tratar a una persona con TEPT para que pueda superarlo.
¿Qué es el TEPT y cómo se diagnostica?
A continuación, profundizamos en qué es el trastorno por estrés postraumático, los criterios del Manual de Diagnóstico de los Trastornos Mentales (DSM 5), las fases del estrés postraumático y los tipos de TEPT.
Trastorno por estrés postraumático: definición
El significado de trastorno por estrés postraumático (TEPT) se corresponde con el de un trastorno mental que puede aparecer en algunas personas tras un evento traumático, como vivir o presenciar un acontecimiento peligroso o impactante, y que produce síntomas que incluyen pesadillas, ansiedad y pensamientos incontrolables.
La historia del trastorno de estrés postraumático (Post-traumatic Stress Disorder, PTSD, por sus siglas en inglés) comienza con su conceptualización clínica allá por los años 80. Pese a que se conocían las reacciones postraumáticas en veteranos de guerra o en víctimas de agresiones sexuales, no existió como tal una definición del TEPT hasta esta década. Es en estos años cuando aparece por primera vez en la tercera edición del Manual de Diagnóstico de los Trastornos Mentales (DSM).
A partir de ese momento, se desarrollaron estudios sobre el trauma y sobre lo que es el estrés postraumático hasta ir dando forma a qué es el TEPT en psicología y psiquiatría. En la actualidad, este trastorno mental está clasificado en el DSM 5 dentro del grupo de los trastornos relacionados con traumas y factores de estrés.
Tipos de estrés postraumático
Después de vivir acontecimientos traumáticos, los síntomas del estrés postraumático pueden ser una respuesta refleja natural del cuerpo y la mente (mostrar síntomas ansioso-depresivos e incluso disociación). En el caso de los trastornos traumáticos, es el factor temporal el que determina su clasificación.
¿De cuántos tipos de estrés postraumático podemos hablar?
- Trastorno de estrés agudo (TEA): tiene una duración de entre tres días y un mes, y comienza de forma inmediata tras sufrir un trauma.
- Trastorno de estrés postraumático (TEPT): cuando el estrés traumático persiste durante más de un mes y afecta significativamente a la calidad de vida de la persona con flashbacks, pesadillas, cambios de humor, problemas para dormir… estaríamos hablando de un diagnóstico diferencial de TEPT o trastorno de estrés postraumático. Cuando los síntomas duran más de tres meses, nos encontramos ante casos de estrés postraumático crónico.
Además de la duración, otra diferencia entre estrés postraumático y estrés agudo es que el TEPT puede empezar a presentar su sintomatología meses más tarde de que se produjera el evento traumático.
Vistas las diferencias entres TEA y TEPT, hay que puntualizar que hay quienes defienden que hay un tipo de TEPT más: el trastorno de estrés postraumático complejo (TEPT-C). Se habla de TEPT-C como una consecuencia de sufrir un episodio de estrés postraumático o varios durante un período prolongado de tiempo, y suele relacionarse con episodios durante la infancia con padres abusivos y el abuso sexual y emocional en general.
Pese a que el trastorno de estrés postraumático complejo fue propuesto para ser incluido en el DSM-5, el manual no lo recoge; por tanto, no hay una definición exacta. Sin embargo, quien sí lo incluyó fue la OMS en la versión 11 de la Clasificación Internacional de Enfermedades (CIE-11).
Por último, es importante señalar la diferencia entre estrés postraumático y trastorno adaptativo. Mientras que el TEPT se desarrolla como respuesta a un evento traumático extremo, el trastorno adaptativo surge como una reacción a un cambio significativo en la vida, pero no necesariamente traumático, y generalmente tiene una duración más corta y un pronóstico más favorable.
Cómo identificar el trastorno de estrés postraumático según el DSM-5
Veamos los criterios diagnósticos del TEPT según el DSM-5:
- Haber experimentado, o presenciado, una situación en la que se haya visto peligrar la propia integridad física o la de las personas cercanas.
- Este suceso traumático ha provocado miedo intenso, temor, horror…
- Tras el shock, los síntomas de una persona con estrés postraumático perduran durante un periodo superior al mes.
- Los síntomas deben provocar un malestar considerable, lo suficientemente importante como para que el desempeño social, familiar o laboral de la persona se vea afectado.
Escala de gravedad de síntomas del trastorno de estrés postraumátio (EGS-R)
Además de seguir los criterios del DSM-5, los profesionales de la salud mental, cuentan con otros instrumentos con los que evaluar la gravedad de los síntomas del trastorno de estrés postraumático y planificar el tratamiento. Se trata de la escala TEPT EGS-R , estructurada en una entrevista de 21 ítems (o preguntas) de acuerdo con los criterios del DSM.
Asimismo, existen otros tipos de test para evaluar el trastorno de estrés postraumático, como veremos más adelante.
Fases y síntomas del estrés postraumático
Puede que te estés preguntando: ¿cómo saber si tengo estrés postraumático? Para evaluar si hay un trastorno es imprescindible acudir a un profesional de la salud mental. El psicólogo evaluará el estado psicológico de la persona para analizar si concurren síntomas del estrés postraumático, que variarán en función de la fase en la que la persona esté.
El trastorno por estrés postraumático, en función de los síntomas, tiene tres fases con distintas características cada una:
1. Fase de hiperactivación: tras el acontecimiento traumático, el sistema nervioso de la persona está en un estado de alerta permanente.
Los síntomas en esta fase del estrés postraumático:
- sobresaltos, asustarse con facilidad,
- dormir mal,
- carácter irritable, ataques de ira…
2. Fase de intrusión: el trauma interrumpe de forma constante en la vida de la persona.
Los síntomas y consecuencias del TEPT en esta fase:
- recuerdos recurrentes e involuntarios,
- revivir el acontecimiento como si estuviera pasando en el presente,
- flashbacks,
- pesadillas nocturnas.
3. Fase de constricción o evitación: la persona puede experimentar una sensación de indefensión aprendida tan intensa que trata de evitar las situaciones que le causan malestar:
- Intenta no pensar ni hablar sobre lo que le produjo el shock postraumático.
- Evita lugares, actividades o personas que le puedan traer recuerdos del evento traumático.
Los síntomas de un cuadro de estrés postraumático van cambiando a lo largo de las fases y se van tornando más limitantes.
También es común presentar síntomas físicos por estrés postraumático, como por ejemplo:
- dolores de cabeza,
- mala memoria,
- falta de energía y de concentración,
- sudoración,
- palpitaciones,
- taquicardia,
- falta de aire…
¿Cuánto tiempo después del suceso aparecen los síntomas en el trastorno de estrés postraumático?
La aparición de síntomas suele ser gradual y los primeros se manifiestan tras la exposición al hecho traumático. Tras un mes cumpliendo con los criterios del diagnóstico, ya podríamos decir que el trastorno ha aparecido.
Sin embargo, hay algunos casos en los que no se llega a cumplir con todos los criterios diagnósticos durante un largo tiempo. Hablamos de trastorno o síndrome de estrés postraumático de inicio tardío si los síntomas aparecen al menos seis meses después del acontecimiento traumático.
Por otra parte, muchas personas se preguntan cuánto dura el estrés postraumático. La respuesta es que la duración del TEPT varía significativamente entre los individuos, pudiendo ser transitorio en algunos casos o convertirse en una condición crónica que persiste durante años si no se recibe el tratamiento adecuado.
Secuelas del estrés postraumático
El trastorno de estrés postraumático (TEPT) puede llevar a una variedad de consecuencias graves y debilitantes. Entre las secuelas más comunes se encuentran la ansiedad postraumática y la depresión postraumática, las cuales pueden manifestarse a través de síntomas como insomnio, ataques de pánico y mareos. Además, las personas afectadas pueden experimentar desmayos y vértigo, complicando aún más su calidad de vida.
En algunos casos, el TEPT puede derivar en condiciones más graves como psicosis por estrés postraumático o brotes psicóticos. Otras consecuencias del estrés postraumático incluyen la pérdida de memoria y la ceguera por estrés postraumático, que aunque raras, son extremadamente impactantes para las personas que las sufren.
Causas del trastorno del estrés postraumático y factores de riesgo
Como ya hemos visto, este trastorno va ligado a la experiencia de un suceso traumático vivido en primera persona o como testigo.
Situaciones y ejemplos de estrés postraumático:
- Exposición a la guerra, ya sea como combatiente (trastorno postraumático en psiquiatría militar) o como civil afectado.
- Presenciar o experimentar ataques terroristas, torturas, amenazas.
- Traumas infantiles derivados de abuso sexual, maltrato físico o emocional.
- Desastres naturales (que también generan ecoansiedad).
- Accidentes de tráfico (en los casos más graves puede derivar en miedo irracional a conducir).
- Violencia doméstica, violencia de género y violencia obstétrica.
- Ser víctima de un atraco o testigo de un delito violento.
Estas son las causas del trastorno de estrés postraumático más frecuentes. No obstante, no son las únicas. Por ejemplo, la Facultad de Estudios Superiores Iztacala de México junto a Iskalti Atención y Educación Psicológica, realizó un estudio (en 2020) en el que se advirtió que la prevalencia de síntomas de trastorno por estrés postraumático podría ser alta en aquellas personas que habían padecido COVID.
Por otro lado, el trastorno de estrés postraumático en el embarazo, en el parto y después del parto o posparto también se da y, a pesar de ser el tercer trastorno psiquiátrico más frecuente en las mujeres embarazadas, el TEPT no siempre es reconocido correctamente, según las investigaciones del Bloque obstétrico de la Fundación Hospital Alcorcón.
Otra causa, o ejemplo de estrés postraumático, es la traición. Jennifer Freyd, psicóloga de la Universidad de Oregón (Estados Unidos), fue la primera en estudiar este tipo de trauma que sobre todo viven los niños cuando, dentro de su núcleo familiar, sufren violencia por parte de las figuras de referencia.
La psicóloga estadounidense también hizo referencia al trauma por traición institucional, es decir, cuando la institución de la que alguien depende lo maltrata o no le ofrece la protección que se supone debiera ofrecer (en este grupo entran las víctimas por violencia de género, las víctimas por agresión sexual, los veteranos de guerra cuando todavía el TEPT no estaba reconocido, las víctimas de abuso sexual por parte de instituciones religiosas…).
Además, el estrés postraumático puede surgir en adolescentes como resultado del bullying. Otro factor de riesgo significativo es sufrir un accidente de tráfico, donde la gravedad del evento puede desencadenar miedo intenso y estrés duradero.
El duelo por la pérdida de un ser querido también puede ser una causa importante del trastorno de estrés postraumático. Este tipo de trauma, conocido como estrés postraumático por duelo, puede provocar síntomas intensos y prolongados de tristeza, ansiedad y desesperación.
¿Quiénes tienen más factores de riesgo a la hora de sufrir TEPT?
Aquellas personas con problemas previos de salud mental, como trastorno de pánico, alguno de los diferentes tipos de depresión, TOC… pueden estar más predispuestas a sufrir estrés postraumático. También aquellas personas con consecuencias psicológicas después de un accidente automovilístico son más propensas a desarrollar TEPT.
Las personas con baja resiliencia, definida como la capacidad para responerse de experiencias traumáticas y adversidades de la vida, también presentan un mayor riesgo de desarrollar TEPT.
Otro grupo de personas expuestas a la hora de sufrir TEPT son quienes ejercen algunas profesiones de riesgo como por ejemplo, las fuerzas del orden, bomberos, profesionales de la sanidad en servicios de urgencia, etc. En estos casos, se puede producir una discapacidad o incapacidad por estrés postraumático para continuar desarrollando su trabajo. Además, el grado de discapacidad que pueda resultar del TEPT puede variar ampliamente, afectando tanto la vida profesional como personal del individuo.
Según una investigación que se publicó en Psychological Bulletin, de la Asociación Americana de Psicología (APA), las mujeres tienen más probabilidades de cumplir los criterios diagnósticos del trastorno de estrés postraumático. Al parecer los hombres son más propensos al TEPT por agresiones físicas, accidentes, catástrofes, combates… Mientras que en las mujeres se puede dar el trastorno de estrés postraumático crónico en víctimas de agresiones sexuales, en víctimas de la violencia doméstica y por abusos sexuales durante la infancia.
Trastorno por estrés postraumático por maltrato infantil
El TEPT no solo ocurre en adultos. El trastorno por estrés postraumático por abuso infantil es bastante frecuente. Según investigaciones (Nurcombe, 2000; Paolucci, Genuis, & Violato, 2001) el TEPT es una de las enfermedades más frecuentes en las víctimas de abuso sexual infantil, con una prevalencia que oscila entre 20-70% de los casos.
En los niños con TEPT encontramos estos síntomas:
- Revivir el acontecimiento traumático mediante pesadillas o flashbacks.
- Aislarse del entorno.
- Sentimiento de culpa por no haber podido hacer nada para impedir o detener el suceso.
- Sentir que el mundo es irreal (proceso de despersonalización/desrealización).
- Sentir temor, miedo y presentar comportamientos desorganizados o agitados.
- Dificultades para concentrarse y conciliar el sueño.
- El trauma puede manifestarse en el juego.
La detección temprana del TEPT es necesaria para poder iniciar un tratamiento cuanto antes. En el caso de los niños y adolescentes se desarrolló la Escala Infantil de Síntomas del Trastorno de Estrés Postraumático (The Child PTSD Symptom Scale, CPSS). La CPSS incluye 17 ítems acerca de los síntomas postraumáticos.
Hay que tener en cuenta que el estrés postraumático en adolescentes puede manifestarse de diversas maneras, como a través de pesadillas, flashbacks y evitación de situaciones que les recuerden el trauma, afectando significativamente su desarrollo y vida diaria. Por otro lado, el estrés postraumático en bebés, aunque menos comúnmente reconocido, puede ocurrir como resultado de experiencias traumáticas tempranas y se puede presentar con síntomas como irritabilidad excesiva, dificultades para dormir y problemas de alimentación.
Comorbilidad del TEPT con otras afecciones
El TEPT a menudo coexiste con otras afecciones de salud, como la depresión, la ansiedad, o los trastornos de pánico. Además, puede aumentar las posibilidades de desarrollar trastornos alimentarios (adicción a la comida, entre otros) y otros problemas de dependencia de sustancias como el alcohol u otras drogas, así lo demuestran algunos casos clínicos de TEPT (caso real publicado en Revista Sanitaria de Investigación).
Sin embargo, y pese a lo que creen muchas personas, no se produce esquizofrenia por estrés postraumático. La esquizofrenia, si bien puede ir acompañada de aislamiento, alucinaciones auditivas y/o visuales, no parte de un evento concreto como sucede con el TEPT, sino de la combinación del factor genético con el medio en el que se desarrolla una persona, y de las experiencias vividas.
¿Cómo saber si tengo trastorno de estrés postraumático? TEPT test
Existen diversas pruebas, a modo de cuestionario TEPT, para que los profesionales de la psicología evalúen los síntomas del TEPT y puedan determinar el tratamiento a seguir. Cada caso de TEPT puede ser tratado con metodologías diferentes, los test son una herramienta más a disposición de los psicólogos que podrán avalarse de ella cada vez que lo consideren necesario, evaluando caso por caso. Algunos de los más populares:
- Escala de Trauma de Davidson (The Davidson Trauma Scale – DTS).
- Cuestionario de Experiencias Traumáticas (Questionnaire to rate Traumatic Experiences TQ).
- Índice Global de Duke de Mejoría del Trastorno por Estrés Postraumático (Duke Global Rating Scale for PTSD – DGRP).
Si lo que buscas es un test de estrés postraumático gratis para tu autodiagnóstico, la OCU tiene uno. Ahora bien, si crees vivir con estrés postraumático lo mejor es que acudas a un profesional para que sea quien haga un diagnóstico y te indique la terapia para TEPT más adecuada.
Trastorno de estrés postraumático (TEPT): tratamiento
¿El estrés postraumático se cura? Seguir un tratamiento psicológico es lo más eficaz. Hasta el momento, uno de los enfoques terapéuticos más utilizados para tratar el trastorno de estrés postraumático es la terapia cognitivo-conductual. El objetivo de esta terapia es ayudar a la persona a identificar los pensamientos y creencias negativas y las alternativas conductuales más funcionales y beneficiosas en relación con el suceso traumático. Algunas de las técnicas y ejercicios para superar el estrés postraumático utilizados en el tratamiento psicológico del TEPT:
- exposición para reducir las situaciones de evitación,
- técnicas de relajación,
- reestructuración cognitiva,
- técnica EMDR (puede ayudar a procesar la experiencia traumática trabajando sobre los recuerdos relacionados con el trauma. Como consecuencia, la carga emocional disminuye y los pensamientos intrusivos se hacen menos frecuentes).
Para entender cómo combatir el estrés postraumático, es fundamental reconocer los síntomas y abordar el tratamiento de manera integral. Esto implica un enfoque multidisciplinario que puede incluir tanto tratamiento psicológico como tratamiento farmacológico en los casos más graves. Algunas personas buscan cómo manejar el estrés postraumático a través de técnicas específicas, mientras que otras necesitan aprender cómo lidiar con el estrés postraumático en su vida diaria con intervenciones más amplias y duraderas.
Para aquellos que se preguntan cómo ayudar a una persona con estrés postraumático, es vital ofrecer un entorno de apoyo y comprensión. Escuchar sin juzgar y acompañar en el proceso de búsqueda de ayuda profesional puede marcar una gran diferencia. Además, fomentar un ambiente seguro y estable contribuye significativamente a la recuperación y al bienestar general de la persona afectada.
En cualquier caso, el trastorno por estrés postraumático necesita de un tratamiento individualizado según el caso concreto de cada persona. El acompañamiento empático, cálido y desde un lugar seguro, el que tú elijas si te decides por las ventajas de la terapia online, hará que poco a poco recuperes la calma y la serenidad en tu vida.
Libros y películas sobre TEPT
Hay muchos libros y películas que han abordado el tema del trastorno de estrés postraumático, proporcionando una visión profunda y a menudo conmovedora de esta condición psicológica. En la literatura, obras como "El ruido de las cosas al caer" de Juan Gabriel Vásquez y "El sobreviviente" de Wulf Dorn exploran los efectos del TEPT en sus personajes, mostrando cómo los traumas del pasado afectan sus vidas presentes.
En el cine, películas como "El francotirador" (American Sniper), dirigida por Clint Eastwood, y "En tierra hostil" (The Hurt Locker), dirigida por Kathryn Bigelow, han retratado de manera impactante las experiencias de los soldados que sufren de TEPT después de regresar del combate. Estas películas destacan los desafíos psicológicos y emocionales que enfrentan los veteranos, y ofrecen una mirada interesante a sus luchas internas y el impacto de las experiencias traumáticas en su vida diaria.