¿Tienes una sensación de vacío en el estómago?, ¿tienes acidez estomacal, pero no es por nada que hayas comido? Puede tratarse de ansiedad estomacal. Se trata de un problema habitual hoy en día que viene acompañado de distintos síntomas y que no sólo afecta a los adultos sino también a los niños.
Si tienes la sensación de un nudo en el estómago por ansiedad, en este artículo te contamos todo lo que necesitas saber sobre ello: desde sus causas y síntomas, hasta los remedios para que puedas aliviar y calmar ese malestar estomacal.
Nervios en el estómago por ansiedad: ¿qué sucede?
Lo primero es aclarar qué es la ansiedad estomacal para que puedas distinguirla de otros trastornos de carácter físico. Una vez que se ha descartado que no padeces una afección gastrointestinal, como puede ser el comer algo en mal estado, es momento de centrarse en los síntomas emocionales, que también pueden desencadenar sensación de malestar en el aparato digestivo.
Esto se conoce como ansiedad estomacal y puede aparecer en ciertos momentos. Es decir, hay situaciones capaces de desencadenar la ansiedad en el estómago, que se manifiesta, por ejemplo, con náuseas. Algunas de las situaciones estresantes que producen malestar estomacal son hablar en público o empezar un nuevo trabajo, por ejemplo.
También es posible experimentar las famosas mariposas en el estómago que suelen asociarse al enamoramiento. Pero la conexión entre el cerebro y el aparato digestivo es muy intensa. El tracto gastrointestinal es muy sensible a las emociones: ira, ansiedad, tristeza, alegría y, como ya adelantamos, enamoramiento. Estas emociones son capaces de desencadenar una serie de síntomas que darán la sensación de estar enfermo.
Estrés y ansiedad estomacal
El estrés también juega un papel fundamental cuando se trata de la ansiedad en el estómago. Y es que, aunque no lo creas, el estrés puede producir un desequilibrio en la flora intestinal y éste traducirse en ansiedad estomacal, una sensación de vacío y nervios que afecta al aparato digestivo y que acarrea varios síntomas, como veremos más adelante.
Las claves del dolor de estómago por ansiedad
Al existir una estrecha relación entre el estómago, el intestino y el cerebro, no es nada descabellado experimentar dolor en la boca del estómago por ansiedad y otras manifestaciones. Estos síntomas se agravan cuando la persona, en general, presenta ya algunos problemas estomacales a causa de una enfermedad.
El dolor estomacal es más agudo en aquellas personas que están ansiosas y estresadas y que, a la vez, padecen gastritis y otras afecciones del tracto digestivo. Por eso es que las personas que ya tienen un padecimiento crónico estomacal deben prestar aún más atención y extremar cuidados.
Síntomas de la ansiedad en el estómago
Las molestias en el estómago pueden ser el espejo de otros trastornos estomacales como el síndrome de colon irritable, la enfermedad de Crohn, colitis, gastritis y gastroenteritis. Estos desórdenes pueden hacer que las manifestaciones de la ansiedad estomacal sean aún mayores.
¿Y cuáles son estos síntomas?
- Cólicos.
- Cambios de apetito.
- Gases y diarrea.
- Indigestión.
- Náuseas.
- Acidez estomacal.
- Estómago distendido o hinchazón.
- Cosquilleo, hormigueo o presión en el estómago.
- Ansiedad en la boca del estómago (sensación de vacío).
- Sudores nocturnos y ansiedad al intentar conciliar el sueño. Esta ansiedad puede producir insomnio o dificultad para volver a quedarse dormido.
Hay que tener en cuenta que estos y otros síntomas pueden evaluarse con un test para la ansiedad para conocer la frecuencia, intensidad y gravedad de los mismos.
Los niños también pueden experimentar ansiedad y gases en el estómago y describen los síntomas de manera distinta. Un niño que tiene ansiedad estomacal se quejará de dolores en la tripa, pero sin estar asociado a una enfermedad o infección.
Generalmente, los niños se quejan de estos dolores por las mañanas, antes de ir al colegio o antes de enfrentarse a situaciones que les causan estrés como un examen, un partido de fútbol o cualquier otra actividad extracurricular que genere gran expectativa.
¿Qué causa el dolor estomacal por ansiedad?
El tracto gastrointestinal cuenta con su propio sistema nervioso, llamado sistema nervioso entérico. Las terminaciones nerviosas del estómago están estrechamente asociadas a las hormonas del estrés liberadas por el cerebro y que son parte de la respuesta de huida o lucha. Cuando este mecanismo se activa, las hormonas del estrés le indican al estómago que disminuya su velocidad para que los músculos y pulmones puedan bombear más sangre.
El estrés y la ansiedad son los causantes de esa sensación de ardor, pinchazos y palpitaciones en el estómago. ¿Y qué las ocasiona? Existen diferentes factores que pueden desencadenar el malestar estomacal por ansiedad, vemos algunas de las más destacables:
- Un evento importante como un examen o una presentación. Esta es una causa muy frecuente entre los adultos que comienzan un nuevo trabajo o deben conseguir un cliente; pero también afecta a los niños y adolescentes cuando tienen que presentar un examen, dar un recital en el colegio o jugar un partido de fútbol, así como cualquier otra actividad de gran importancia.
- Ansiedad social. Se trata del miedo a ser juzgado o rechazado por los demás, algo que puede ocurrir al momento de hablar en público, presentar un examen o simplemente ser el centro de atención unos minutos.
- Miedo a perder el control. Las personas con ansiedad estomacal suelen tener miedo a perder el control en ciertos momentos. Es por eso que enfrentarse a situaciones que no están cuidadas al milímetro y no dependen de ellos pueden producir ansiedad.
- Hipocondría. La influencia del cerebro sobre el resto del cuerpo es poderosa y, pensar que puedes enfermar en cualquier momento o estar expuesto a cambios repentinos que suponen un riesgo, también puede ocasionar ansiedad en el estómago. La hipocondría es creer, de forma extrema, que vas a enfermar o que algo va a pasarte.
- Ansiedad generalizada: Las personas con ansiedad generalizada están constantemente preocupadas por todo cuanto ocurre a su alrededor y experimentan altos niveles de ansiedad crónica y malestar.
- Inseguridad. De la mano del apartado anterior está la inseguridad. No sentirse preparado del todo para exponer esa presentación o realizar un examen pueden acelerar la aparición de la acidez estomacal y ansiedad.
- Problemas económicos y pérdida de empleo.
- Problemas familiares y/o laborales.
- Agotamiento laboral: el síndrome de burnout es una fuente de estrés y ansiedad que afecta física y mentalmente.
- Rupturas amorosas, separaciones y divorcios.
- Embarazo. El estrés y la ansiedad en el embarazo pueden contribuir al dolor y las molestias estomacales.
- Mudanzas. Como ya hemos visto, la ansiedad estomacal puede aparecer durante y/o después de un episodio de estrés y cambiarse de casa o de ciudad puede hacer aparecer los síntomas de ansiedad y nervios en el estómago.
- La muerte de un ser querido. Las etapas del duelo también pueden desencadenar ansiedad y malestar estomacal.
- Distintos tipos de fobias. Las fobias también pueden ocasionar ansiedad en el estómago cuando la persona sabe que se verá expuesta a ese temor. Por ejemplo, miedo a hablar en público o coger un avión.
¿Cómo calmar la ansiedad estomacal?
La ansiedad y el dolor de estómago son habituales y pueden presentarse en situaciones muy concretas como empezar un nuevo empleo o hasta antes de contraer matrimonio. El problema es cuando esta ansiedad comienza a condicionar tu vida. Es decir, cuando ir al trabajo o exponerte a cierta situación se vuelve un drama.
¿Qué puedes hacer al respecto? ¿Cómo calmar la ansiedad? ¿Cómo tranquilizar los nervios rápido? ¿Y qué remedios hay para la ansiedad estomacal?
Terapia psicológica
Pedir cita con un psicólogo online puede ser justo lo que necesitas: el enfoque psicológico no busca aliviar los síntomas de la ansiedad estomacal (dolor, náuseas, etcétera); sino que te ofrece las herramientas necesarias para ganar confianza en ti mismo, trabajar la baja autoestima y encontrar la raíz del problema.
Un psicólogo puede implementar la terapia cognitiva conductual, que contribuye a reducir la ansiedad y, en consecuencia, los síntomas estomacales. A través de esta terapia se enseña a manejar las interacciones entre los sentimientos, pensamientos y el comportamiento.
Pero además, también puedes realizar terapia interpersonal (TIP). Se trata de un método que se centra en los roles de las relaciones y que busca mejorar la comunicación entre personas. Para la TIP se emplea un tiempo determinado y se establecen objetivos definidos.
Terapia de relajación
Para aliviar la ansiedad en el estómago existen técnicas de relajación que permiten a la persona sentirse relajada y evitar reacciones intensas (como las náuseas), ante situaciones muy estresantes. Para ello es posible trabajar la relajación muscular progresiva, visualizar escenas que sean relajantes e incorporar terapias específicas como la musicoterapia.
Respiración diafragmática y meditación
Este tipo de respiración es un ejercicio que contribuye a modular el funcionamiento del sistema nervioso, mientras regula el sistema gastrointestinal. La respiración también puede acompañarse de la meditación, un entrenamiento mental en el que se enseña al cuerpo y la mente a centrarse en el presente y aceptar los pensamientos y sentimientos.
Estilo de vida saludable
Una de las mejores maneras de controlar la ansiedad en el estómago es a través de la actividad física y una buena alimentación. Para ello nada como apuntarse a unas clases dirigidas de yoga, que combinan a la perfección la actividad física, con la respiración y la meditación.
El autocuidado resulta esencial para contribuir a llevar un estilo de vida saludable y, con ello, reducir la ansiedad estomacal. Por eso es fundamental seguir una alimentación equilibrada, que no sólo contribuya a mantener al cuerpo sano, sino que también ayude a mantener a raya los niveles de estrés. Seguir una dieta adecuada es una gran alternativa para mejorar los ciclos del sueño (y con ello el estrés y la ansiedad crónica), pero también para reducir la inflamación estomacal y hasta controlar la presión sanguínea.
Establecer unos hábitos de sueño específicos puede resultar difícil si se sufre de ansiedad en el estómago, de ahí la importancia de seguir una alimentación balanceada. Pero otra manera de contribuir a dormir bien es a través del ejercicio, otra forma de autocuidado. Puedes practicar yoga, como ya te hemos adelantado, pero también cualquier otra rutina de ejercicios que te ayuden a descargar energía y descansar mejor por las noches.
Por último, es importante establecer rutinas específicas del sueño. Es decir, diseña un ritual a tu medida, como irte a la cama a la misma hora y desconectar de la luz azul de las pantallas, pues estas producen estimulación y ayudan a no descansar como es debido.