Tener un estado de ánimo cambiante, no poder sobrellevarlo y luchar para convivir con ello son algunos de los sentimientos que a menudo pueden experimentar quienes padecen trastorno ciclotímico o ciclotimia.
En este artículo profundizamos en la ciclotimia e intentamos comprender mejor:
- Qué es la ciclotimia.
- Cómo saber si una persona tiene trastorno ciclotímico.
- Cuánto dura la ciclotimia y cómo tratarla.
- Diferencias entre el trastorno límite de la personalidad y la ciclotimia o entre la ciclotimia y el bipolarismo.
- Qué significa para alguien "ser ciclotímico".
Además, analizaremos cuál es el tratamiento más eficaz para la ciclotimia y veremos si es posible curar el trastorno ciclotímico.
Qué es la ciclotimia
La etimología de esta palabra es de origen griego y deriva de kyklos 'círculo' y thymos 'estado de ánimo'. La palabra ciclotimia se utiliza para describir las fluctuaciones emocionales que caracterizan a este trastorno del estado de ánimo.
La persona ciclotímica puede sentirse feliz y tener la sensación de estar en la cima del mundo durante un tiempo pero, después, puede sentirse por los suelos y completamente agotada. La lectura de la definición aclara inmediatamente el significado de ciclotimia: un trastorno del estado de ánimo caracterizado por fluctuaciones emocionales que van desde una depresión moderada hasta un estado de euforia y excitación.
Ciclotimia: definición y criterios diagnósticos del DSM-5
En el DSM-5, el trastorno ciclotímico, que se contempla dentro de los diferentes tipos de depresión, describe esencialmente a una persona con estados de ánimo subsindrómicos anormales presentes al menos la mitad del tiempo durante un período de dos años, pero también establece que el individuo no puede estar sin síntomas hipomaníacos o depresivos durante más de dos meses seguidos.
Por lo general, la aparición del trastorno ciclotímico se produce en la adolescencia o en los primeros años de la vida adulta. Los criterios diagnósticos del trastorno ciclotímico, expresados en el DSM-5, son los siguientes:
- Durante al menos dos años (un año en niños y adolescentes) ha tenido numerosos períodos con síntomas hipomaníacos que no cumplen los criterios para un episodio hipomaníaco y numerosos períodos con síntomas depresivos que no cumplen los criterios para un episodio depresivo mayor.
- Durante este tiempo de dos años, los períodos hipomaníacos y depresivos estuvieron presentes al menos la mitad del tiempo y la persona no estuvo libre de síntomas durante más de dos meses.
- No se cumplen los criterios para un episodio depresivo mayor, maníaco o hipomaníaco.
- Los síntomas del Criterio A no se explican mejor por un trastorno esquizoafectivo, esquizofrenia, trastorno esquizofreniforme, trastorno delirante o trastorno del espectro esquizofrénico y otros trastornos psicóticos con otra especificación o sin especificación.
- Los síntomas no se deben a los efectos fisiológicos de una sustancia (por ejemplo, los efectos de las drogas) u otra afección médica general (por ejemplo, hipertiroidismo).
- Los síntomas causan malestar clínicamente significativo o deterioro social, laboral o de otras áreas importantes.
El trastorno ciclotímico crónico
Como hemos visto, la ciclotimia es un trastorno psicológico caracterizado por períodos hipomaníacos, con un estado de ánimo caracterizado por un humor elevado, excitación, aumento de la productividad y euforia excesiva.
Puede ocurrir que este estado se alterne con períodos de bajo estado de ánimo (disforia). El trastorno ciclotímico crónico es, sin embargo, menos grave que el trastorno bipolar. En la hipomanía crónica, es decir, una variante clínica poco frecuente, predominan los períodos de euforia, con una privación habitual del sueño de unas seis horas.
Las personas con esta forma del trastorno pueden parecer muy a menudo seguras de sí mismas, llenas de energía y empuje, siempre con mil proyectos listos antes incluso de terminar uno y, como resultado, estar ocupadas y ser impredecibles.
Síntomas de la ciclotimia
Los principales síntomas del trastorno ciclotímico pueden ser diferentes y estar relacionados con las fases depresiva e hipomaníaca. A continuación, presentamos los síntomas más habituales que se pueden encontrar en una persona con ciclotimia son:
- agresividad
- angustia
- anhedonia (no poder disfrutar de actividades gratificantes o no tener ganas de hacer nada)
- comportamiento impulsivo
- depresión
- logorrea
- euforia
- hipomanía.
Los trastornos ciclotímicos también pueden afectar al ciclo sueño-vigilia, con momentos de insomnio y gran nerviosismo.
Causas de la ciclotimia o trastorno ciclotímico
Las causas del trastorno ciclotímico siguen siendo, hasta la fecha, objeto de estudio e investigación científica por parte de los profesionales, que confirman la presencia de una interacción entre factores neurobiológicos, genéticos y ambientales.
En la mayoría de los casos, las primeras manifestaciones clínicas de inestabilidad tímica aparecen durante la adolescencia y suelen interpretarse erróneamente como "problemas" relacionados con la edad o cambios en el carácter y la personalidad.
Los síntomas depresivos suelen atribuirse a acontecimientos vitales estresantes concomitantes o más o menos "autopercibidos" como traumáticos, mientras que los síntomas hipomaníacos y subexcitatorios relacionados pasan desapercibidos o se consideran parte de la "agitación adolescente normal".
Ciclotimia y otros trastornos mentales
Como ya se ha mencionado, la ciclotimia entra dentro del espectro del trastorno bipolar, hasta el punto de que también se denomina trastorno bipolar ciclotímico, pero como forma menos grave que el tipo 1 y el tipo 2.
La diferencia entre la ciclotimia y el trastorno bipolar de tipo 1 y 2 se encuentra principalmente en tres elementos:
- la alternancia de episodios depresivos y maníacos
- la alta frecuencia
- la duración.
La naturaleza esencialmente bipolar del temperamento ciclotímico viene sugerida por la marcada propensión de las personas a virar hacia la hipomanía y/o la manía cuando son tratadas con antidepresivos.
Además, los pacientes ciclotímicos que presentan recaídas frecuentes y cambios de humor extremos pueden ser diagnosticados de trastornos de la personalidad, como el trastorno límite. Al respecto, un interesante artículo de G. Perugi y G. Vannucchi señala que:
"La presencia de rasgos 'borderline' en pacientes ciclotímicos parece derivar de una importante desregulación del estado de ánimo, donde la sensibilidad interpersonal y la inestabilidad emocional y motivacional tienen un efecto importante en la historia personal del paciente, desde la infancia."
Hay que distinguir entonces entre ciclotimia y distimia. La principal diferencia entre el trastorno depresivo ciclotímico y el distímico radica en los cambios de humor: en la distimia no están presentes, mientras que sí lo están en la ciclotimia que, como hemos visto, también se caracteriza por una depresión cíclica.
Ciclotimia y relaciones
Para la persona que padece ciclotimia no siempre es fácil reconocer sus síntomas y comprender lo que está ocurriendo. Basta decir que, durante un episodio hipomaníaco, uno puede sentirse invencible, lleno de energía y, a nivel social, parecer incansable, exuberante, con muchos proyectos innovadores.
El carácter ciclotímico, en algunas personas, puede favorecer el éxito en el trabajo, la adquisición de roles de liderazgo y una gran creatividad. Sin embargo, si a primera vista esto puede parecer un aspecto positivo, no es raro que haya consecuencias perjudiciales en las relaciones interpersonales.
Si analizamos la ciclotimia y las relaciones afectivas, por ejemplo, no será raro observar que estas últimas pueden verse afectadas por el síndrome ciclotímico: las relaciones de amistad o familiares, por ejemplo, pueden tener dificultades para avanzar en la misma dirección.
En la mente de una persona con ciclotimia, los pensamientos pueden fluir excesivamente, tanto que vive casi en un estado continuo de tensión y angustia, como si el tiempo se le fuera de las manos. Además, las personas ciclotímicas pueden sufrir episodios de abuso de alcohol y drogas.
Todas estas dificultades se reflejan negativamente en la esfera social, laboral y relacional del individuo, hasta tal punto que se puede hablar de trastorno ciclotímico y discapacidad, que se reconoce en una tasa de entre el 31% y el 40% y está destinado a las personas que padecen un trastorno ciclotímico con repercusiones en la vida social.
Ciclotimia y amor
El estado de ánimo ciclotímico puede afectar a una relación amorosa, que puede ser calificada de "relación tóxica", provocando posibles crisis de pareja y repetidas rupturas sentimentales o matrimoniales.
Por otra parte, puede no ser fácil saber cómo comportarse con una persona con depresión y, como hemos visto en relación con las causas y los síntomas de la ciclotimia, una pareja ciclotímica puede tener un comportamiento caracterizado por una fuerte ambivalencia y alternar momentos de amor y dulzura con otros caracterizados por la agresividad y la falta de empatía.
Escuchando los testimonios de quienes padecen trastorno ciclotímico o conviven con una persona ciclotímica, podemos comprobar cómo, incluso en lo que se refiere a la ciclotimia y la sexualidad, existen ciertas dificultades que pueden perjudicar la calidad de una relación.
De hecho, la hipersexualidad puede manifestarse como uno de los síntomas secundarios de un trastorno del estado de ánimo como la ciclotimia y puede surgir especialmente si se trata de un individuo ciclotímico con tendencia a la bipolaridad.
Trastorno ciclotímico del estado de ánimo: remedios y tratamiento
Como consecuencia del cuadro clínico descrito, no llevar a cabo ningún tratamiento para el trastorno ciclotímico puede acarrear importantes problemas emocionales que afectan a todos los ámbitos de la vida.
De hecho, el trastorno ciclotímico no tratado puede:
- Conducir, con el tiempo, a un alto riesgo de desarrollar trastorno bipolar tipo I o II.
- Provocar un trastorno de ansiedad asociado.
- Aumentar el riesgo de pensamientos suicidas.
- Llevar al abuso de sustancias y desarrollar el riesgo de adicción.
Aunque existen curas y tratamientos para este tipo de trastorno, la persona con ciclotimia los necesitará durante toda su vida, incluso durante los periodos en los que todo parece ir bien.
Por lo tanto, es importante encontrar lo antes posible un tratamiento adecuado que pueda limitar de forma tangible los síntomas y las posibles complicaciones. Por esta razón, no se puede considerar ninguna cura natural para la ciclotimia.
¿Qué tratamiento es posible entonces para el trastorno ciclotímico? En la fase de diagnóstico, el especialista puede utilizar pruebas para evaluar si existe un trastorno ciclotímico.
Las pruebas más comunes para el diagnóstico del trastorno ciclotímico son:
- Escala de Estado Interno (ISS): que evalúa diferentes tipos de trastorno bipolar, ciclotimia y estados mixtos y se centra en detectar posibles síntomas de depresión y episodios maníacos.
- Inventario de Depresión de Beck (BDI): diagnostica estados depresivos y es una referencia estándar internacional
- Mania Rating Scale (MRS): escala de valoración que investiga los síntomas de los episodios maníacos en sus diferentes intensidades.
Ciclotimia: terapia psicológica y farmacológica
La terapia se basa en la utilización de métodos y técnicas psicoterapéuticas, a veces combinados con la administración de psicofármacos específicos contra los trastornos del humor y la depresión, que actúan sobre la regulación de la serotonina y la dopamina.
Las psicoterapias más recomendadas son:
- la terapia cognitivo-conductual
- la terapia interpersonal
- la terapia de grupo.
Estas últimas también pueden ser de gran ayuda para la pareja y la familia, ya que pueden ayudar a sacar a la luz y gestionar las posibles dificultades y aspectos emocionales de la convivencia con una persona ciclotímica.
En cuanto a la medicación (la lamotrigina o el litio se prescriben con frecuencia para el tratamiento de la ciclotimia), esta debe adaptarse a cada paciente y a cada caso, por lo que puede llevar un proceso más largo, ya que algunos medicamentos necesitan semanas o meses para hacer pleno efecto.
Acudir a profesionales cualificados y especializados, como psicoterapeutas con experiencia en trastornos del estado de ánimo (incluidos los psicólogos online) es de vital importancia para controlar este trastorno. El apoyo terapéutico para recuperarse del trastorno ciclotímico tendrá como objetivo reducir los síntomas y prevenir la posibilidad de que cada episodio ciclotímico desemboque en el desarrollo de episodios maníacos y depresivos.